Ayer en la Parroquia de San Pedro se celebró la festividad de San Antonio de
Padua con la Santa Misa, que estuvo a cargo del párroco de San Pedro, Rvdo. Sr.
D. Alfonso Cabezuelo Cano, que centró su homilía en la vida de San Antonio de
Padua.
En la misa de ayer pude comprobar que
las medallas de los hermanos han desaparecido, nadie las lucio, y la presencia
de la Hermandad que le rinde culto solo se hizo presente en la venta del “Pan
de los pobres” y que la Santa Misa fue ofrecida por los difuntos de la
hermandad.
La imagen ciudadrealeña de San Antonio
es de un joven sin barba y de figura estilizada. Viste hábito marrón, con
cordón de tres nudos a la derecha y el rosario a la izquieda. Sobre su mano
izquierda se encuentra el Niño Jesús que sienta cátedra sobre un libro que es
símbolo de sabiduría y enseñanza. El libro en el caso de San Antonio encierra
su doctrina, predicación y magisterio, que le valieron ser Doctor de la
Iglesia. Por último porta el lirio, símbolo de pureza por excelencia,
representa consagración y amor virginal.
Al terminar la Santa Misa se repartió
tras entregar un donativo el llamado “Pan de los pobres”, unos panes bendecidos
que tienen una proyección social, ya que los donativos metálicos que se
recaudan se destinan íntegramente a los pobres.
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