sábado, 7 de octubre de 2017

¿QUIEN FUE EL GENERAL REY?


 
Vista de la calle General Rey en los años cincuenta del pasado siglo XX

La calle General Rey de nuestra ciudad, es una céntrica calle comprendida entre la calle Ruiz Morote y la de Mata, que hasta febrero de 1913 recibió el nombre de Ballesteros.  El 13 de febrero del año referido, el ayuntamiento acordó el cambio de nombre de Ballesteros a General Rey, en honor a Antonio del Rey y Caballero. Nacido en Valladolid el 10 de junio de 1814, falleció en Madrid el 6 de agosto de 1886. Fue un político y militar español, héroe de la Primera Guerra Carlista, en el bando cristino, teniente general del ejército, ministro de la guerra, presidente del Consejo Supremo de Guerra y Marina, y senador por la provincia de Ciudad Real en 1871-1872; 1876-1877; 1877; 1879-1880 y 1881-1882.

¿Pero qué relación tenía este militar y político con Ciudad Real, para que el Ayuntamiento le diera nombre a una calle de nuestra ciudad?  El ilustre manchego, D. Francisco Rivas Moreno, en el boletín de la Real-Academia  Hispano-Americana de Ciencias y Artes, publicó en octubre de 1918, la siguiente biografía del General Rey”,  y la relación que tuvo con Ciudad Real, en su sección: “Los grandes hombres de mi patria Chica:

Carácter netamente castellano, el General Rey dejó afectos imborrables en todos los que tuvimos la satisfacción de tratarle.

Era un gran corazón, pronto siempre a las más nobles expansiones.

En el trato de gentes, ponía el gran vallisoletano los acentos de la más impecable sinceridad.

Llegó a ser en Ciudad-Real una verdadera institución.

Conocía a los humildes y a los encopetados por sus nombres y apellidos; y cuando saludaba, procuraba siempre marcar bien esta circunstancia.

Había nacido en Valladolid el 10 de junio de 1814, y empezó a estudiar Leyes en la Universidad de Alcalá de Henares, cuando su familia acordó que ingresara en el ejército como Alférez de Milicias.

Luchó, con su proverbial arrojo, contra los carlistas. Ascendió a Alférez de la Guardia Real poco antes de ser disueltos por Espartero los dos regimientos que de esta clase existían.

Vivía en aquella sazón en Ciudad-Real, D. Hilarión del Rey, padre de D. Antonio, y representante de la Sociedad Arrendataria de la Sal y Tabacos. A esta circunstancia se debió que constituyera familia el General Rey en la Mancha.

Era de buena estatura y porte.

Como el Conde de la Cañada, casó con una distinguida dama de la familia de los Medranos.

Iniciado en 1843 el movimiento revolucionario de Narváez en favor de la Regencia de María Cristina, fue de los primeros en ofrecer su espada; y ascendido a Capitán, fué destinado al ejército que luchaba en Cataluña contra los carlistas.

 
Último retrato del General Rey, personaje que le da nombre a la calle

Su bravura y pericia militar quedaron bien probadas, y sobre el campo de batalla ganó los grados de primer Comandante y Teniente Coronel. Se encargó entonces del mando del batallón de Cazadores de Figueras. Fue Coronel de los regimientos de Guadalajara y Burgos.

Ascendido a Brigadier, fue a reemplazar al General Manso de Zúñiga, que había muerto luchando heroicamente en Linas de Marcuello. AI frente de su brigada, estuvo en la plaza de Santo Domingo el 22 de junio de 1866, y su arrojo y bravura fueron proverbiales en aquellos sucesos.

Cuando se afilió a la Unión Liberal, era ya General.

Tomó parte muy principal en la Revolución de Septiembre, marchando a unirse a Serrano con las fuerzas que mandaba como Comandante General de Ceuta.

En los anales de la hermosa ciudad de Granada están escritas con pluma de oro las páginas destinadas a narrar el período de mando del General Rey.

Difíciles, muy difíciles eran las circunstancias cuando se encargó de aquella Capitanía General, pero su gran discreción - y energía salvaron todos los obstáculos, y el éxito más completo coronó un período de mando que los granadinos recordarán siempre como fecha fasta.

El General Rey fue declarado Hijo predilecto de Granada, y jamás hubo mayor conformidad y unanimidad de opiniones que en aquella ocasión para ofrecer un homenaje de cariño y respeto a una autoridad.

Si se hubiera hecho por medio de un Referéndum, es seguro que alcanza la unanimidad en los sufragios.

Fué Director General de Administración Militar, Capitán General de Castilla la Nueva, Presidente del Consejo de Guerra y Marina y Ministro de la Guerra, demostrando en todos estos cargos sus grandes talentos y sus nobles condiciones de carácter.

Cuanto más elevada era su posición oficial, extremaba doblemente sus atenciones y afectos a los manchegos que le visitaban.

Fué Diputado a Cortes por Granada y Albuflol, y representó en el Senado la provincia de Ciudad-Real, concediéndole Sagasta más tarde la Senaduría vitalicia.

Murió en Madrid el bizarro General a consecuencia de una apoplegía, y la prensa de todos los matices y los hombres políticos de las más opuestas filiaciones tuvieron ocasión con este triste motivo de testimoniar a la familia las grandes simpatías que había conquistado el General Rey en todas las clases sociales.

Bien hará Ciudad-Real perpetuando la memoria del General querido, que en vida supo unirse a los manchegos por los fuertes vínculos del más sincero afecto.

 
La calle General Rey en la actualidad

2 comentarios:

  1. Es muy interesante, no sabía tanto de él. Yo conozco cosas de su mujer Ramona Medrano.
    Gracias

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    1. Me gustaría saber más cosas de él y también de su mujer Ramona Medrano que debió ser una mujer fuerte y decidida. Muchas gracias si me mandan información!
      pivalles@yahoo.com

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