lunes, 1 de junio de 2020

UNA ACCIÓN DE GRACIAS A LA VIRGEN DE ALARCOS EN 1890


Primitiva imagen gótica de la Virgen de Alarcos, destruida en 1936 por milicianos de izquierdas al inicio de la Guerra Civil Española

En Ciudad Real iba hace pocos días por la vía férrea, con dirección a las Huertas, una familia muy conocida en aquella ciudad, cuando sin saber cómo, una preciosa niña de diez años que formaba parte de la misma, quedó sujeta por el tacón de la bota entre dos raíles, precisamente cuando el tren mixto de Badajoz avanzaba a toda velocidad.

La madre de la niña, presa de indescriptible espanto, empezó a porfiar por sacar el piececito de su hija, pero todos los esfuerzos eran vanos, antes al contrario, se complicaba más la cosa ante el sobresalto de todos y la llegada del tren, que se aproximaba a pasos agigantados.

Una catástrofe era inevitable, y hubiera ocurrido seguramente si el padre de la criatura, serenándose repentinamente, no hubiera procedido con prontitud a desabrochar los botones del calzado de la niña y tirar de esta con fuerza, al tiempo que la maquina y coches pasaron como una exhalación por encima de la bota desprendida, que quedó aplastada y deshecha.

Pasado el peligro, la madre fue acometida de un sincope, y al volver en sí, ofreció una función religiosa a la Virgen de Alarcos en acción de gracias por haberla conservado su hija.

Fuente: Periódico   La Iberia (Madrid. 1868) 10 de marzo de 1890, página 2

No hay comentarios:

Publicar un comentario