domingo, 26 de junio de 2022

EL RELIEVE DE ANTONIO MARTÍNEZ PENELLA DEL HOSPITAL DE NUESTRA SEÑORA DE ALARCOS

 



El Hospital de Nuestra Señora de Alarcos, tiene situado en su fachada principal un relieve del escultor Antonio Martínez Penella, realizado en 1965. Pero quien fue este escultor:

Antonio Martínez Penella (Masanasa, Valencia 3-I-1917 - Bayona, Pontevedra, 2008). Fue un escultor valenciano que decoró varias iglesias y edificios públicos en el franquismo. Hijo de los agricultores Antonio Martínez y Vicenta Penella, comenzó como aprendiz en un taller de cantería a los 12 años. En 1930, ingresó en la Escuela de Artes y Oficios Artísticos de Valencia. Tras la interrupción de la guerra y el servicio militar, prosiguió en los talleres de los maestros Carmelo Vicent y hermanos Capuz. 




Sus primeros trabajos consistieron en la reparación de imaginería religiosa dañada en la guerra. En 1943 consiguió una plaza por oposición en la Diputación de Valencia. En 1944 ganó el Premio Nacional de Escultura de España. En 1945 quedó tercero en España  y en 1948 segundo en Valencia. A finales de la década de los cincuenta, se trasladó a Madrid, gracias a una beca de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y realizó algunas estancias en Londres y París. En 1963 ganó la cátedra de la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando. En 1960 se casó con la escultora Michele Lescure, que se encontraba becada en la Casa de Velázquez. El matrimonio tuvo dos hijos, Paloma y Antonio.

 



Desde la década de los sesenta se dedicó a la enseñanza de dibujo, pasando en 1985 a la Facultad de Bellas Artes de San Fernando en la Universidad Complutense de Madrid. En esta época alternó la enseñanza y los encargos de escultura, a veces con la ayuda de su esposa. Con 68 años se retiró. De 1993 en adelante pasó largas temporadas en Bayona (Pontevedra), a donde acabó trasladando su residencia.​ Allí murió con 91 años. Uno de los motivos más repetidos en Penella fue el desnudo humano. Se dijo de sus esculturas que tenían "un carácter plástico fuerte, sentido moderno y la calidad clásica".​

Esperemos que con la demolición que se anuncia del Hospital de Alarcos, este relieve, que no deja de ser una obra de arte, se salve como patrimonio histórico de la ciudad.




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