La Hermandad de la Corte de Honor de Nuestra Señora la Santísima Virgen del Prado, una de las dos hermandades que dan culto a nuestra querida Patrona en la S.I.P.B. Catedral, cumple cien años de su creación, aunque no fue aprobada definitivamente y erigida canónicamente hasta el año 1928.
En el mes de mayo 1921 el Cabildo Catedral crea una comisión capitular para que redactará los Estatutos de la futura Corte de Honor de la Virgen del Prado, con el fin que las mujeres de Ciudad Real pudieran asociarse oficialmente para honrar a la patrona. Para elaborar sus estatutos, los canónigos de nuestro Cabildo se fijan en los estatutos de la Corte de Honor y de los Caballeros de la Virgen del Pilar, que habían sido fundados en la Santa Capilla de la Basílica del Pilar de Zaragoza a principios del siglo XX. Un año después, en mayo de 1922, la corporación capitular pone en funcionamiento a su amparo, pero en la forma “ad experimentum”, la Corte de Honor de Nuestra Señora la Santísima Virgen del Prado, a la que no solo podían pertenecer mujeres, sino también hombres.
Hay que tener en cuenta que desde el año 1600, se encontraba establecida en la Catedral la Ilustre Hermandad de Nuestra Señora la Santísima Virgen del Prado, que era la encargada de procesionar, rendir culto y custodiar el ajuar de la Virgen. Esta solo estaba compuesta por hombres, y la misma en el año 1922, que es cuando se crea la Corte de Honor, a ella solo podían pertenecer 80 hermanos.
La única
finalidad de la Corte de Honor desde sus orígenes, era la de fomentar los
cultos en honor a la Virgen del Prado, es decir el Novenario de Mayo y el
Triduo de Agosto, ya que las labores de conservación y custodia de las alhajas,
joyas y mantos de la Virgen del Prado, estaba a cargo desde el siglo XIX, por
designación de la Ilustre Hermandad, en las mujeres de la familia
Rosales-Medrano, como anteriormente lo había estado en las mujeres de otras
ilustres familias de la ciudad.
El Excmo. Cabildo Catedral, al poner en funcionamiento la Corte de Honor, pondría al frente de la misma como Director Espiritual, al canónigo Lic. José María García Muñoz, que había llegado al Cabildo de nuestra Catedral en 1901, siendo promovido a Maestrescuelas en 1921. La Corte de Honor inició su andadura con veinticinco asociados, y un donativo de quinientas pesetas, por parte del que fuera sexto Obispo-Prior, D. Javier Irastorza y Loinaz.
D. José María García Muñoz fallecería en enero de 1928, y para entonces la Corte de Honor ya contaba con 725 asociados, tenía en caja cuatro mil trescientas veintiuna pesetas, y un gasto anual de mil pesetas. A D. José María le sustituyó como Director Espiritual, en febrero del citado año, D. Pedro Fernández de Sevilla, Arcediano catedralicio. Un mes después, tras estar varios años en funcionamiento “ad experimentum”, el 12 de marzo de 1928, el séptimo Obispo-Prior, el hoy Beato, D. Narciso de Estenaga y Echevarría, aprueba el Reglamento de la Corte de Honor: “…estimando que ha de redundar en grande honor y veneración de la Ssma. Virgen, así como en provecho espiritual de los fieles; por el presente venimos en erigir y erigimos canónicamente en Nuestra Santa Iglesia Prioral la piadosa asociación titulada Corte de Honor de Ntra. Sra. la Ssma. Virgen del Prado, que habrá de regirse por el presente reglamento”.
Al aprobarse el reglamento de la Corte de Honor, se le ofrece a la entonces Camarera de la Virgen, que ocupaba este cargo desde el año 1918, Dª. Teresa Rosales y del Forcallo, Medrano y Maldonado, que aceptara ser la Presidenta de la Corte de Honor, cargo que acepto y ocupó hasta su fallecimiento.
Al ser nombrado
Deán del Cabildo en 1930 D. Pedro Fernández de Sevilla, es nombrado Director
Espiritual de la Corte de Honor, D. Francisco Lorente Villegas, quien ostentaría dicho cargo hasta
su fallecimiento en febrero de 1942.
Al inicio de la Guerra Civil Española en 1936, la Corte de Honor fue disuelta por el gobierno republicano del Frente Popular, al igual que el resto de cofradías y hermandades, y obligada a entregar al Gobierno Civil el dinero que tenia en caja, que ascendía a la cantidad de 1.236 pesetas.
Terminada la Guerra Civil en 1939, la Corte de Honor se reorganizaría en 1940, pagando en el año 1943 todos sus asociados la cantidad de tres pesetas. La organización de la Corte de Honor en aquellos años se realizaba a través de los denominados coros, a cuyo frente estaban las celadoras, existiendo en el año 1945 un total de 17 coros de señoras y un coro de caballeros.
Después de la Guerra Civil, la actividad de la Corte de Honor se siguió centrando en la organización de los cultos de mayo y agosto exclusivamente, sin tener ninguna responsabilidad en vestir a la imagen de la Virgen, ya que esta labor la seguía desempeñando Dª. Teresa Rosales, con mujeres que trabajaban a su servicio en su domicilio. Los mantos y vestimentas de la Virgen, no se guardaban entonces en la Catedral, sino que se custodiaban desde 1918 en su domicilio particular, que se encontraba en la calle Calatrava con Paloma, donde posteriormente se construiría el edificio de la Cámara de la propiedad urbana.
La Corte de Honor nunca celebraba asamblea general de hermanos, sino que era su Junta de Gobierno la que gobernaba la hermandad, reuniéndose esta dos veces al año, una antes de los cultos de mayo, y otra antes de los cultos de agosto, siendo la misma Junta de Gobierno, la que designaba a las mujeres que deberían formar parte de la misma, cuando se producía alguna vacante. Las reuniones se celebraban en alguna de las salas de la entonces Prioral, hoy Catedral.
Fallecida en 1963 Dª Teresa Rosales, es nombrada Camarera de la Virgen, siguiendo la tradición familiar, su hija Dª. María Teresa Medrano y Rosales, Rosales y del Forcallo, aceptando ser Presidenta de la Corte de Honor, en la reunión de la Junta de Gobierno celebrada el 24 de abril de 1964. También en este último año, y por motivos de salud, dejaría de ser Consiliario D. José Jiménez Manzanares, tomando posesión como nuevo Consiliario, D. Bartolomé Miquel Díez.
La cuota que
pagaban las asociadas/os en el año 1972, era de veinticinco pesetas, siendo
nombrado Consiliario en mayo de 1977, D. Félix Rodríguez-Izquierdo, entonces
Deán del Cabildo Catedralicio, ante la ausencia de D. Bartolomé Miquel, hasta
entonces Consiliario de la Corte de Honor, por dedicarse a cuidar fuera de
Ciudad Real, al entonces ya Obispo Emérito, D. Juan Hervás.
La Corte de Honor y la Ilustre Hermandad de la Virgen del Prado, acordarían nombrar a su majestad la Reina de España, Dª Sofia de Grecia, Camarera de Honor de la Virgen, con ocasión del IX Centenario de la aparición de la Virgen en Ciudad Real, que se celebraría en 1988. La Corte de Honor adoptó este acuerdo en la Junta de Gobierno celebrada el 4 de julio de 1987, siéndole entregado este nombramiento a la Reina en el Palacio de la Zarzuela, el 15 de marzo de 1988.
En el año 1999, se produciría la muerte de Dª. Carmen Montarroso, señora que cuidaba la ropa de la Virgen, y era quien verdaderamente vestía a la Virgen del Prado, como anteriormente lo había realizado su madre, que era personal de servicio de la familia Medrano-Rosales. Fue tras la muerte de Dª. Carmen Montarroso, cuando asociadas a la Corte de Honor, comienzan a vestir a la Virgen del Prado.
D. Jesús Abad Ramos, sería nombrado Consiliario en el año 2001, comenzándose entonces a redactarse nuevos Estatutos de la Corte de Honor, ante la perdida de los aprobados en 1928. Por este motivo se convocaría por primera vez en la historia de la Corte, el 9 de abril de 2002, Asamblea General Extraordinaria, donde son aprobados sus nuevos Estatutos, y ante la renuncia al cargo de Camarera de la Virgen y Presidenta de la Corte de Honor, por motivos de edad y salud, de Dª. Teresa Medrano, es nombrada nueva Presidenta-Camarera, Dª. Pilar Cid Gómez; siendo nombrada a su vez Presidenta-Camarera de Honor Perpetua, Dª. Teresa Medrano y Rosales. Por este motivo los mantos y ropas de la Virgen, que se custodiaban hasta entonces en casa de Dª. Teresa, en la calle Toledo, pasarían a ser depositados a la Catedral, haciéndose cargo de su conservación a partir de este año la Corte de Honor.
En la Junta General Extraordinaria celebrada el 3 de diciembre de 2015, es nombrada Presidenta-Camarera de la Corte de Honor, Dª. Celia Casado Puentes; y tras los actos del Cincuentenario de la Coronación de la Virgen del Prado, celebrados en el año 2017, cesaría como Consiliario D. Jesús Abad, siendo nombrado nuevo Consiliario D. Francisco Romero García.
Por último,
comentar que la Corte de Honor celebra todos los años en el mes de mayo, un acto de imposición de
las medallas a las nuevas/os asociados, siendo la medalla de plata con la efigie
de la Virgen del Prado en el anverso con la leyenda "Sed siempre mi Madre", y la silueta de la Catedral en el reverso,
con la leyenda “Corte de Honor de Ntra. Sra. del Prado”, con cordones azul y
blanco.
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