EL EDIFICIO DEL HOSTAL CASABLANCA YA FORMA PARTE DE LA HISTORIA DE LA CIUDAD

 

Fotografías José Barahona Parras

El edificio que albergará el antiguo hostal Casablanca, situado en la ronda de Granada, ya es historia de Ciudad Real. Casi cinco quilos de explosivos fueron necesarios para derrumbar este inmueble, de cinco plantas, que ha quedado reducido a más de 1.000 toneladas de escombros.

Así, a las doce en punto de la mañana se hizo explosionar el edificio, de una forma muy silenciosa ya que los explosivos utilizados fueron detonantes sordos. La voladura, que partió en el edificio en dos mitades, con caída controlada hacia el barrio de Los Ángeles, provocó una nube de polvo que se disipó pasados unos minutos.

 

Eduardo Fernández, gerente de la empresa Volconsa, encargada de llevar a cabo la voladura, explicó que todo había salido según lo previsto. Cientos de personas se agolparon alrededor del cinturón de seguridad que la Policía Local había instalado en un radio de más de cien metros para ver la demolición, primera de estas características que se realiza en Ciudad Real.

Fernández explicó que este tipo de voladuras no producen onda expansiva y, como se pudo comprobar, fueron escasos los cascotes que cayeron a más de tres metros del edificio.

Tras la voladura, que duró escasos segundos, el edificio quedó convertido en una gran montaña de escombros que, según Eduardo Fernández, serán retirados antes de1 lunes próximo.

El personal de la concejalía de Limpieza del Ayuntamiento procedió inmediatamente a dejar bien limpia la zona de escombros y polvo.

Por su parte, el concejal de Urbanismo, Gabriel Miguel, explicó que el edifico del Hostal Casablanca fue construido hace más de 35 años y desde hace seis se encontraba deshabitado. Indicó que fue expropiado por el Ayuntamiento a Construcciones Aguilar, último dueño, para convertirlo en una zona verde, tal y como se contempla en el último Plan General de Ordenación Urbana de Ciudad Real.

Por último, añadir que la Policía Local, Guardia Civil y Protección Civil montaron un amplio dispositivo para evitar problemas.

Diario Lanza, viernes 9 de marzo de 2001