La calle Obispo Hervás, es una pequeña calle que comunica la calle Olivo con la calle Alarcos y Tinte. Esta nueva calle surge en el año 1969, sobre los terrenos del antiguo seminario de la calle Alarcos, proponiendo que esta nueva calle llevara el nombre de Obispo Hervás en homenaje al que fuera Obispo-Prior de la diócesis, D. Juan Hervás y Benet.
El pleno del ayuntamiento de Ciudad Real,
presidido por el que fuera alcalde, don Luis Martínez Gutiérrez, propuso
dedicar esta nueva calle al prelado de la diócesis al cumplirse el XXV aniversario
de su ordenación episcopal “en consideración a los merecimientos pastorales
y ciudadanos y a la actividad religiosa desarrollada por el ilustre prelado”.
La propuesta fue aprobada por unanimidad.
D. Juan Hervás y Benet nació en el seno de una
familia obrera valenciana en Punzol el 30 de noviembre de 1905. Ordenado
sacerdote el 17 de junio de 1929, fue nombrado por el Papa Pio XII el 13
de enero de 1944, obispo titular de Alinda y obispo auxiliar del Arzobispo de
Valencia. El 26 de octubre de 1946 fue nombrado obispo coadjutor de Mallorca,
con derecho a sucesión, pasando a obispo residencial el 22 de diciembre de
1947. Allí es donde impulsó el movimiento de los Cursillos de Cristiandad.
El 14 de marzo de 1955 fue nombrado IX Obispo titular de Dora y Prior de
las Órdenes Militares con sede en Ciudad Real. Renunció a la misma el 30 de
septiembre de 1976 por enfermedad. Falleció en Felanich el 6 de junio de 1982,
siendo obispo emérito. El día 9 del mismo mes fue sepultado en la capilla de
Nuestra Señora de los Dolores de la Catedral de Ciudad Real.
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