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sábado, 30 de noviembre de 2019

EN JUNIO DE 1980 SE PUSO LA BANDERA DEL PRIMER GRUPO DE VIVIENDAS DEL TORREÓN



DRAGADOS Y CONSTRUCCIONES, S. A. "pone la bandera" en el Grupo de Viviendas del Torreón del Alcázar, de la Cooperativa de Viviendas del Magisterio Manchego (COVIMAN)

Comprende 180 viviendas de Protección Oficial de cuatro tipos, locales comerciales, garaje, centro cívico y amplias zonas verdes

Está previsto dotar a este polígono de todos los servicios ciudadanos: Escuela, Guarderías, Iglesia, Correos, Telégrafos, Etc., Etc.

Aparte las zonas verdes entre-bloques, una gran avenida central ajardinada, de más de 10 metros de ancha, por 300 de longitud, dará empaque al “Polígono”


El pasado día 27 de junio, tuvo lugar la "puesta de bandera" a que aludimos en los titulares, con cuyo motivo DRAGADOS V CONSTRUCCIONES, S.A. celebró una pequeña fiesta y comida de hermandad en los propios locales en construcción, con asistencia de técnicos, obreros, empleados y cooperativistas, algunos de ellos con sus distinguidas esposas.

Felicitamos por ello a la empresa constructora, en la persona de su jefe de obra, don Juan Vicente Hurtado y sus técnicos, don Ángel Fermín y don Antonio Fernández. Nos place hacer constar que son arquitectos de este magnífico complejo, don José María Romero Cárdenas y don Eduardo Gascón Recas; y aparejadores, don Antonio Valle Pascual y don Florencio Molina Céspedes.


Vaya nuestra enhorabuena, también, a la Cooperativa de Viviendas del Magisterio Manchego (COVIMAM) y sus 458 socios (de los que el 70 por ciento son maestros), por el esfuerzo que desde su -constitución oficial, el 2 de julio de 1971, está desarrollando por dotar a sus cooperativistas de viviendas dignas y asequibles, que van a ser gala y ornato de la capital. Todas las viviendas construidas están ya adjudicadas, habiendo socios en expectación de vivienda, por lo que se acometerán nuevas promociones en cuanto las circunstancias lo permitan.

Para los interesados en conocer detalles sobre esta Cooperativa nos remitimos al amplio reportaje que sobre la misma publicó nuestro colega «Hoja del Lunes" el pasado 2 de junio, limitándonos nosotros a constatar que los componentes de su junta directiva son: presidente, don Juan Sánchez Campos; vicepresidente, don Miguel Pérez Belmonte; secretario, don Román Martínez Pérez; tesorero, don Reyes López Cerdá; vocales, doña  Violeta T. Rodríguez Barranco y don Juan Ruiz Plaza.

A todos ellos, repetimos, nuestra más sincera felicitación en la efemérides que motiva estas líneas, y por el feliz logro de sus esfuerzos, que deseamos se vean siempre colmados de satisfacciones y éxito.

Diario “Lanza”, miércoles 2 de julio de 1980, página 4


viernes, 29 de noviembre de 2019

LOS ANTIGUOS HUERTOS DEL TORREÓN DEL ALCÁZAR


En esta vista aérea de 1928, podemos ver lo que hoy son los jardines de Torreón y la Avenida del Torreón del Alcázar, eran unos auténticos huertos. Lo señalado con el circulo, corresponde donde se encontraba el Arco del Torreón en aquellos años.

Lo que hoy son los jardines del Torreón, y todo lo que rodea al arco del antiguo Alcázar Real, hasta los años setenta del siglo XX, era un gran huerto propiedad hasta el año 1941 de Dimas García del Moral, pasando en el citado año a manos de Evelio Coronado.

Estos terrenos estaban cargados de una gran historia y llenos de grandes vestigios arqueológicos, que con el paso del tiempo fueron desapareciendo. A parte del Arco del Torreón, que se derrumbó el 1 de enero de 1962, y que se pudo reconstruir gracias a la enumeración de las piedras  que hizo José Lomas Recuero antes de su caída; eran famosas las cuevas que rodeaban al arco. Estas cuevas constaban de túneles de tres metros de alto por seis de ancho, con varias entradas y dos tragaluces (http://elsayon.blogspot.com/2015/06/las-cuevas-del-torreon.html). 

Casa de labor y residencia de la familia Coronado en los Huertos del Torreón 

Actualmente desde el año 2005, tenemos unos restos arqueológicos descubiertos detrás del Arco del Torreón, que están esperando una conservación digna (http://elsayon.blogspot.com/2015/06/las-galerias-descubiertas-en-el-torreon.html), como recuerdo de un pasado que los políticos y la especulación del ladrillo acabaron con él. Junto a estos restos arqueológicos descubiertos en el año 1992, apareció un aljibe de captación de agua con arcos de ladrillo de tipo mudéjar, alguno de ellos con cabeza cortada previsiblemente del siglo XVI pero que pudieran tener su origen en el siglo XIV, que una vez más los intereses especulativos acabaron con ellos (http://elsayon.blogspot.com/2015/06/los-restos-arqueologicos-que-si-nos.html).

Esta zona, sensible a descubrimientos arqueológicos, no solo conserva de su pasado el Arco del Torreón, y las cuevas descubiertas tras él, sino que en el año 2007 se descubrió, dentro del recinto del Colegio Público Carlos Vázquez, un Pozo de Nieve (http://elsayon.blogspot.com/2013/07/el-pozo-de-nieve-de-la-huerta-del.html), que es un resto arqueológico poco conocido y que se conserva.

En esta imagen de los años setenta, en pleno proceso de nueva urbanización del polígono, podemos ver el arco del Torreón del Alcázar y justo enfrente las viejas edificaciones desaparecidas del primitivo barrio del Torreón

jueves, 28 de noviembre de 2019

LA DESAPARECIDA CALLE ALCÁZAR


Vista de la calle Alcázar desde la calle la Mata

Una de las antiguas calles del trazado histórico urbanístico de Ciudad Real, desapareció con la urbanización del polígono del Torreón del Alcázar, en los años setenta del pasado siglo. Esa calle, era la calle Alcázar, que se ubicaba entre la calle Cierva y Madrilas, que se iniciaba en la calle Mata y terminaba en lo que entonces se llamaba Camino de Ronda. La calle se encontraba partida en dos por la Calle Joven, que nacía en la calle Hidalgos y moría precisamente en la calle Alcázar, tras atravesar las calles Pozo Concejo y Cierva.

En la  calle Alcázar se combinaban las edificaciones de una sola altura, con las de dos plantas, dando la fachada lateral de lo que fue la Casa Popular, donde se encontraba la vieja portada que algunos historiadores la situaban como la de la antigua “Casa de la Moneda de Ciudad Real” (http://elsayon.blogspot.com/2015/10/la-casa-de-moneda-en-ciudad-real.html), lo que demuestra la antigüedad de esta calle ya desaparecida y que la situaba en la ciudad medieval.

La calle Alcázar donde se situaba la Casa de la Moneda, cuya portada podemos ver en la fotografía 

miércoles, 27 de noviembre de 2019

COMENZÓ LA DEMOLICIÓN DEL POLÍGONO DEL “TORREÓN DEL ALCÁZAR”


La demolición de las viejas viviendas del Torreón comenzó en 1973

Las viejas Casas del Polígono del «Torreón del Alcázar» han empezado a ser demolidas. El Ministerio de la Vivienda ha cumplido su palabra y Ciudad Real va a ver realizada una de sus aspiraciones urbanas más importantes, tras no pocas demoras y hasta negativas, que al fin han podido ser superadas.

A mediodía de ayer, en la zona más próxima a la Casa Tutelar de San Rafael, las potentes máquinas, echaron abajo las últimas casas de la calle del Pozo Concejo y otras que se hallaban aún ocupadas, hasta momentos antes, por algunos de sus antiguos moradores, y a quien la empresa de Baldomero Sánchez, adjudicataria de la demolición, ha transportado generosamente sus modestos enseres hasta los nuevos alojamientos.

Estuvieron presentes en esta primera demolición, al mismo tiempo simbólica y efectiva, el gobernador civil, señor Villalobos Beltrán; el presidente de la Diputación, señor De Juan; el alcalde, señor Sancho; delegados de Hacienda, Vivienda y Relaciones Sindicales, señores Casado, Maldonado Cocat y García Cuesta; los señores Torres, Lozano, Parra y Montero, estos dos últimos director de Asistencia y Promoción de la O. S. y secretario de la Obra Sindical del Hogar; el secretario de la Vivienda, señor Pancorbo; el jefe del Servicio del I.N.V., señor Taboada; el arquitecto de la Vivienda, señor Bernalte; y e1 jefe del Servicio de Habitabilidad, señor Carpintero.

Media hora antes del derribo, los últimos ocupantes del polígono trasladan sus modestos ajuares

Antes de procederse a la demolición, el señor Maldonado Cocat, explicó al gobernador civil y demás persona1idades las características del polígono, señalando sobre el plano sus límites y la zona sobre la que se va a operar con carácter más inmediato. Como se sabe, la extensión total del po1ígono es de casi diez hectáreas.

Momentos después de la una de la tarde, las potentes máquinas iniciaron la demolición y a renglón seguido salieron cargados de escombros los primeros camiones. Las obras no se interrumpirán ya hasta que quede realizada por completo la explanación, cuyo presupuesto, a cargo del Ministerio de la Vivienda, supone un millón cien mil pesetas.

Como se sabe, el Ministerio de la Vivienda ha satisfecho, por expropiaciones en el polígono, durante el pasado año, la cantidad de pesetas 137.730.918.

Según manifestó e1 delegado señor Maldonado, en esta primera fase se construirán 250 viviendas sociales, a través de la Obra Sindical del Hogar, y con ellas, una vez terminadas, se atenderán las necesidades más urgentes que se deja sentir en la capital.

El gobernador civil permaneció en el polígono cerca de medio hora y al despedirse mostró su satisfacción por esta gran mejora urbana para Ciudad Real, que ahora se inicia.

Diario “Lanza”, sábado 20 de enero de 1973, portada y página 4

Las autoridades de la época en el momento de la demolición

martes, 26 de noviembre de 2019

EL SUBDIRECTOR DE URBANISMO Y TÉCNICOS DEL MINISTERIO DE VIVIENDA EN EL BARRIO DEL TORREÓN DEL ALCÁZAR



Desde Madrid, se desplazaron a nuestra capital, el subdirector gerente de Urbanismo, señor Paz Casañé; el jefe de Planeamiento, señor Alonso Velasco y el director técnico de la Gerencia, señor Zatarain Iglesias; los tres del Ministerio de la Vivienda.

En unión del delegado provincial de la Vivienda estuvieron en primer lugar, inspeccionando terrenos entre las carreteras de Toledo y Carrión y Toledo y Porzuna y Piedrabuena, con el fin de ver zonas en las que poder, en el futuro, ubicar un polígono residencial e industrial, de cincuenta hectáreas, para industria «limpia», es decir, para aquella industria generalmente de grado medio, que no es molesta ni causa perturbaciones ambientales.

Posteriormente, en el Ayuntamiento, cambiaron impresiones con el alcalde, señor Sancho, y la mayor parte de los concejales, sobre los polígonos de Ciudad Real en general, tanto del de la Granja como el del Torreón del Alcázar, que mostraron deseos de visitar. A estas y anteriores visitas, asistieron, también los arquitectos de la Vivienda en nuestra provincia.


Los vecinos del Torreón, espontáneamente, y al darse cuenta de la inesperada visita al barrio, del alcalde y concejales, salieron de sus casas para exponer sus peticiones y el deseo de salir de viviendas en tan malas condiciones de higiene y habitabilidad.

Los tres enviados del Ministerio, al tomar contacto con la realidad de nuestra capital, pudieron percibir, perfectamente, todos los problemas políticos, sociales y económicos planteados en orden a viviendas y polígonos en Ciudad Real.

Posteriormente, se reunieron a comer con la Corporación Municipal, delegado y arquitectos de la Vivienda, a la que asistió el señor gobernador civil.

En las fotos, el alcalde y concejales con los técnicos del Ministerio de la Vivienda, recorriendo el polígono del Torreón del Alcázar.

Boletín de Información Municipal. N.º 33, 1/8/1970.


lunes, 25 de noviembre de 2019

EXPROPIACIÓN, PREPARACIÓN DE SUELO Y PLAN PARCIAL DE ORDENACIÓN DEL POLÍGONO TORREÓN ALCÁZAR EN 1973


Zona del Torreón 1975

Después de los primeros contactos entre el Ministerio de la Vivienda y el Ayuntamiento, iniciados en 1963, referentes a este futuro Polígono residencial, será en abril de 1966 cuando se acuerde “Proponer al Ministerio de la Vivienda, la cesión de este Ayuntamiento, por el importe desembolsado hasta la fecha por aquel Ministerio, del Polígono de la Granja, actualizando y poniendo en ejecución, por su parte, dicho Ministerio, el Polígono del Torreón del Alcázar, para edificación de viviendas de tipo social.

El Ministerio de la Vivienda decidió en noviembre de 1967, encomendar a la Gerencia de Urbanización la renovación de los terrenos para la creación de dicho Polígono. Esta situación venía favorecida, porque ya desde hacía un año se había acordado suspender el otorgamiento de licencias en las calles de este solar.

La Gerencia de Urbanización en febrero de 1968, daba ya los 115.300 m2 que integraban el Polígono, a fin de pasar ya el trámite necesario de información pública para expropiar a los vecinos de clase humilde que allí vivían, al mismo tiempo que aconseja a la Alcaldía, acuerde suspender por un año cualquier tipo de licencia.

El Ayuntamiento, en abril de 1968, acordaría “prestar total conformidad a la determinación del Polígono de expropiación del Torreón del Alcázar”. Según Pedro Bigador, Director General de Urbanismo, en marzo de 1969 estaba “ya terminado el 60% del proyecto de expropiación, y que la totalidad del trabajo lo entregaran a primeros de abril”. En agosto, después de dar lectura a un oficio de la Gerencia de Urbanización de la Dirección General de Urbanismo, referente a la expropiación llevada a cabo y finalizada el mes pasado, la Corporación acuerda aprobar el proyecto después de no haberse presentado ninguna reclamación, dentro de un proceso ágil de tramitación.

Antes de la expropiación existían 142 edificios, la mayor parte de ellos de una planta, que daban albergue a 1.436 personas, para un total de 367 familias. La expropiación afectó a 206 propietarios y 325 arrendatarios; su importe total fue de 134.996.189 ptas.,  que se reparten entre: 57 millones como importe total del suelo; 69,9 millones por importe total de construcciones; 2,8 millones por importe de las indemnizaciones a los arrendatarios, y 5,1 millones como importe de las indemnizaciones e industrias. Al ser la superficie total expropiada 108.315 m2, da un precio medio por m2 de 1.246 ptas. “El 90% de los propietarios y arrendatarios es de condición modesta y muy modesta”.

Zona del Torreón 1975

El B.O.E. de 8 de diciembre de 1970 traía la aprobación del expediente de expropiación del Polígono del “Torreón del Alcázar”. Y en abril del año siguiente se convocaría a los vecinos para abonarles las indemnizaciones.

En definitiva se había expropiado por algo más de mil pesetas el m2, a una población eminentemente obrera, a la que se le decía, que en el Torreón del Alcázar se podría “llegar a la construcción de viviendas auténticamente sociales”, según acuerdos de Pleno de enero de 1970. Y esta idea la ratificaría el Alcalde de Ciudad Real, dos años más tarde, al afirmar que está convencido de haber llegado a una saturación de viviendas tipo medio y de lujo,… Y aclaro rápidamente que para mi concepto, vivienda social es solamente, aquella por la que no hay que pagar ninguna cantidad en concepto de entrada, cuyo pago se pueda diferir en un plazo no inferior a los veinte años, como mínimo,… Esto es lo que de verdad y con urgencia les hace falta a un buen número de familias de Ciudad Real… sustituyendo la casa-chabola que hoy habitan por otra moderna y confortable, dentro de la misma y similar zona… Esta labor está ya iniciada… otras 250 que constituyen la primera fase de este terreno urbano, hueco y desvalido que es el Polígono del Torreón del Alcázar,… Resumiendo para terminar;… construir vivienda eminentemente social,… siempre que fuesen promovidas y ejecutadas por Órganos de la Administración.

El proyecto fue encargado al Arquitecto Municipal D. Ildefonso Prieto y a l D. Francisco Bernalte, que era Arquitecto del Ministerio de la Vivienda, y que fue nombrado Alcalde en agosto de 1973, un mes antes de que se aprobara el B.O.E., sustituyendo a D. Eloy Sancho.

En el verano de 1973 la Corporación aprobaba el Plan Parcial de Ordenación del Polígono “Torreón del Alcázar”, siendo ratificado unos meses después por el Ministerio en el B.O.E. de 1 de septiembre de 1973. Pero en el proyecto no aparecían aquellas viviendas sociales de las que se hablaba…

Felix Pillet “Geografía Urbana de Ciudad Real”. Akal/Universitaria 1984

Zona del Torreón antes de su actual urbanización

domingo, 24 de noviembre de 2019

EL POLÍGONO “TORREÓN DEL ALCÁZAR” ANTES DE SU ACTUAL URBANIZACIÓN



Llegó a nuestra capital el arquitecto-jefe de la Gerencia de Urbanismo del Ministerio de la Vivienda, don Gerardo Calviño, acompañado por varios colaboradores, que visitó en su despacho al alcalde señor Martínez Gutiérrez, a quien acompañaban el presidente de la Comisión de Urbanismo, señor Calahorra y el arquitecto municipal, señor Prieto.

En la reunión se procedió a la delimitación geográfica del Polígono del Torreón del Alcázar, que ha sido ordenada su urgente urbanización por el Ministerio de la Vivienda. Con esta reunión se inició el trabajo de dicho proyecto, de vital importancia para nuestra capital, ya que el mismo comprende una cuarta parte del casco urbano y en él se realizará una urbanización modernísima, que absorberá en su día un conjunto de edificaciones con capacidad para más de 3.000 viviendas.


Independientemente de que con estas construcciones se solucionará el problema de la vivienda en nuestra capital, esta urbanización convertirá toda esa amplia zona, hoy vertedero maloliente, en uno de los barrios más atractivos de Ciudad Real.

Al dar la noticia del comienzo de los trabajos para esta importantísima mejora, al mismo tiempo que como ciudarrealeños nos felicitamos, extendemos esta felicitación al gobernador civil, señor Rico de Sanz; al alcalde, señor Martínez Gutiérrez, y a toda la Corporación Municipal, pues gracias a los desvelos de todos, esta aspiración largamente sentida, va a convertirse en realidad». (De LANZA)


Después de publicada esta noticia por el diario «Lanza», hemos visitado en su despacho al arquitecto municipal Sr. Prieto, quien con su habitual amabilidad y competencia, nos ha informado ampliamente sobre este importantísimo proyecto y nos ha facilitado datos técnicos de sumo interés.

Las obras de urbanización del polígono, como decimos anteriormente, van a ser realizadas, urgentemente, por el Ministerio de la Vivienda.

En la fotografía aérea que publicamos de la zona, pueden seguirse fácilmente los límites del polígono, que son: Partiendo del cruce de la Ronda con la carretera de Carrión, irá salvando parte de las edificaciones que dan a dicha vía, hasta la calle de los Hidalgos, y desde este punto hasta la Ronda se seguirá la acera derecha.


La arteria principal del polígono que se va a urbanizar, será una avenida, de 32 metros de ancha, que irá desde el cruce de la carretera de Carrión con la Ronda hasta la Plaza de San Francisco. Enlazará con dicha avenida, una penetración de la carretera de Valdepeñas, en cuya confluencia se construirá una amplia y moderna plaza. Las calles que podríamos llamar secundarias, responderán todas a un sentido urbanístico moderno, y estarán preparadas para cubrir las necesidades actuales, con aparcamientos capaces, jardines, amplitud vial, etc.

Publicamos algunas fotografías del estado actual de varias de las calles que componen el polígono del «Torreón del Alcázar». Barrizales intransitables, casas en estado ruinoso y antihigiénicas, vertederos infectos.


Quien haya leído la reseña de la última sesión del pleno municipal, celebrado el pasado día 11, se habrá dado cuenta de la gran cantidad de asuntos importantes que están en marcha y que corresponden a la actividad incansable de nuestro alcalde y de la Corporación que tiene emprendida.

Problema que de todas formas hubiera tenido que solucionar nuestro Ayuntamiento mas tarde o más temprano, pero que lo va a hacer en una forma que ni soñada; convirtiendo todo esto, en el barrio más atractivo y mejor de nuestra capital.

Boletín de Información Municipal. N.º 25, 12/1967, páginas 19-23


sábado, 23 de noviembre de 2019

CALLE GRANADA


Vista de la calle Granada desde la calle Ruiz Morote, en los años cincuenta del pasado siglo 

La calle Granada, es una de las calles históricas de Ciudad Real, aunque su aspecto actual no nos muestre nada de su antigüedad y pasado. Recibe el nombre de Granada, por ser la calle por donde se accedía a la Puerta de Granada, y donde comenzaba el camino Real de Granada desde nuestra ciudad.

La calle Granada sabe mucho de frailes, reyes y reos. Sabe de frailes, porque a esta calle daba el convento de los Franciscanos, comunidad nacida con la ciudad y que desapareció en el siglo XIX. También fue la primera calle que recorrió el dominico San Vicente Ferrer en 1411, cuando visitó Ciudad Real y permaneció en ella varios días.  Sabe de Reyes, porque al estar cerca del Alcázar Real, seria recorrida por los monarcas que visitaban nuestra ciudad; y sabe de reos, porque en el siglo XIX, se ajusticiaba a los reos condenados a muerte cerca de la Puerta de Granada, por lo que era la calle por donde accedían estos hacia su patíbulo.

La fisonomía actual de la calle Granada, nada tiene que ver con su pasado, ya que hasta los años setenta del siglo XX, la calle Granada desde sus inicios desde la calle Ruiz Morote, era una calle estrecha, con viviendas de dos alturas ambos lados de la misma, que desaparecerían en los citados años del pasado siglo, para en su solar crearse las zonas verdes que actualmente cuenta la calle.

El nombre de calle Granada, se mantuvo a lo largo del tiempo hasta que en 1932 se le cambió por el del industrial y político, Dámaso Barrenengoa, volviéndose a su antigua denominación en 1939 al final de la Guerra Civil Española.

Vista de la calle Granada desde la Puerta de su mismo nombre en los años cincuenta del siglo XX

viernes, 22 de noviembre de 2019

CALLE DE LA PALMA


Vista del inicio de la calle Palma desde la Plaza de San Francisco, en una fotografía de Julián Alonso de 1949

Palma. Así se llama la hoja de la palmera, árbol corpulento, de ocho a diez y seis metros de altura, de tronco indiviso, recto, erguido, cilíndrico, llamado “estipe”, coronado con un penacho de hojas grandes, hasta de cuatro metros de largas, constituidas por un eje del cual salen segmentos pinnados, estrechos, agudos. Es planta de los oasis africanos aclimatada en el E. y S. de España durante el largo periodo de dominación de los árabes, que fueron quienes la trajeron. Este esbelto árbol, al cabecear con el viento y ondular con movimientos indolentes, elegantes, femeninos, es fácil evoque voluptuosidad adormecedora del erótico paraíso mahometano.

Las diversas clases de palmeras, se cultivan como planta decorativa en parques y paseos. En nuestra región levantina, forma grandes masas, como el famoso palmeral de Elche donde los naturales trepan por los estirpes y atan, a modo de cucurucho, las hojas externas del penacho final. De este modo, las hojas que va dando la yema terminal, desprovistas de luz, no verdean y quedan amarillas, cloróticas, y así, o trenzadas, los segmentos pirinados en bella labor de artesanía, se exportan, en grandes cantidades a todas las regiones de España, y a muchos países, para ser benditas, durante los Santos Oficios del Domingo de Ramos, y repartirías como místico símbolo de la gloria de Jesús en su triunfal entrada en Jerusalén.

También la artesanía hace esterillas, canastos y otros objetos, con los delgados y resistentes segmentos de sus hojas.

Y sus frutos, los dátiles, son comestibles en fresco y conservados. Para las caravanas tienen inapreciables valor.

Bueno será recordar “la palmera del cura” de Elche. Famoso ejemplar de tallo ramificado desde cerca de su base.

La palma es cívico símbolo de Victoria y de Gloria, y, en nuestra religión, además, de la Virginidad y del Martirio, que, si bien lo meditamos, no son otra cosa que lucientes y heroicas facetas de la Gloria y de la Victoria.

Otra imagen de Julián Alonso de 1949, del inicio de la calle Palma vista desde la Plaza de San Francisco

Fundada Villarreal, por el rey Sabio, dentro de las posesiones de la Orden de Calatrava, sus pertenencias se reducían, casi únicamente, al amurallado recinto urbano. El efectivo mandato de la fundación real era contener y neutralizar el creciente y orgulloso poderío de los freires, superior, incluso, al de la corona, a la que, en ocasiones, desbordada. Tal freno despertó en ellos, el deseo de absorber o aniquilar la fundación. Y la malquerencia se manifestó, desde el primer instante, impidiendo cortar leña, hacer carbón; coger esparto, pastar los ganados y establecer colmenas, a los realengos, que replicaban con violencia. Es por lo que tres siglos de nuestra historia se reducen a continuas luchas y represalias entre ambos bandos, que no logran remediar las disposiciones de Alfonso XI, llevando las discordias a la ley para resolverlas.

Cierto que hubo períodos de bonanza, como aquel que permitió a Muñiz de Godoy cubrir de bello artesonado –aun oculto- la iglesia de Santiago, pero destacan por su odio a la fundación real los Maestros don García López de Padilla y, al finalizar la XV centuria, don Rodrigo Téllez de Girón. Un día, éste. A no venir fuerzas de la corona en nuestra defensa, hubiera aniquilado el solar realengo con la ayuda del algunos de sus moradores que, al pasarse al lado del Maestre, combatieron a sus propios hermanos –lo que nunca había ocurrido- con furia y encono malvado, por lo menos.

Cuentan que la dura y terrible lucha comenzó forzando las huestes calatravas la puerta de la Mata, y culminó apoderándose del Alcázar y de buena parte del caserío, hasta que, llegados en auxilio nuestro el conde de Cabra y D. Rodrigo Manrique, Maestre de Santiago, pelearon sus mesnadas dentro de murallas, en cada calle hasta vencer y expulsar al invasor y a los traidores, y restaurar el poder real.

Ante mi tengo una crónica, bicentenaria, que relata aquella invasión calatrava y da, y por eso la traigo acá, el origen del nombre de varias calles, entre ellas el de la Palma. Por ingeniosa, pintoresca, aunque muy discutible, la copió literalmente, si bien salvando la ortografía:

Los calatravos, con cuadruplicadas fuerzas, talaron, a la fuerza, las puertas de la Mata y entraron en las calles. Hubo una matanza horrorosa y por esta causa formó la calle el nombre de la Mata. El Maestre Rodrigo Téllez de Girón llegó con su lanza a las esquinas del cuartel de Milicias, que es al principio de la calle, y dijo: Hasta aquí yací y conquisté esta parte de terreno y población quedando feudataria a la jurisdicción de Calatrava. Como salieron victoriosos, por la calle donde se retiró el ejercito calatravo le quedó el nombre de la Palma, y a la que baja, línea recta, calle de la Sangre por la mucha que corrió por ella. Calle de la Lanza, en recuerdo de la del Maestre, que va a la puerta de la umbría de S. Pedro. Calle de Ballesteros. Calle del Lobo porque entró el ejercito hecho unos lobos rabiosos. Y por esta acción tomaron las calles nombre”.

Esquina de la calle General Rey con Palma en los años cincuenta del siglo XX

Hagamos un inciso. Entonces ya existía la calle de Ballesteros. Se la cita repetidamente, en documentos varios; su enclave en el triángulo Alcázar, S. Pedro, San Francisco, porción populosa en la vida de la ciudad en pasadas épocas, y al celebrarse por esos contornos las ferias, son entre otros, datos suficientes para asegurar la antigüedad de esta calle y no poder compartir la opinión, en este periódico expuesta, de que, hasta época reciente fueran huertos esos parajes. Aunque Ensenada no nos de noticias de la calle o permanezca perdidas.

La calle de la Palma, tiene una salida al comienzo de la calle de la Mata donde, en una portada achaflanada, esculpidos en piedra, dos pajes dan guardia al escudo, también de piedra. Embadurnados de cal, aun conservan su belleza, y, a lo que parece, y con elogiable gusto, piensan limpiar y engarzar esta portada en la fachada del nuevo edificio que levantan sobre el solar de la antigua mansión. No faltan, a lo largo de la calle, otros vestigios de su pasado prócer, aunque, en tiempos posteriores, se hicieran sucios los antecedentes de ella.

Termina en la plaza de S. Francisco, pero antes recibía la confluencia de “la angosta calle de S. Juan Evangelista”, que se iniciaba por San Pedro y que no hemos podido localizar. Por esta subía, en los siglos XVII y XVIII, la procesión del Resucitado, para recoger la imagen del Evangelista en su ermita “sita en la calle de la Palma, en lo que luego fue molino aceitero de don Rafael Barona” -¿sería el molino de Oliva?- “y llegar al convento de San Francisco de donde salían la Soledad y la comunidad franciscana a recibir a Jesús triunfante”. Con igual orden y norma volvía la procesión a la ermita y a San Pedro una vez celebrada, en el convento, solemne función. Recordemos, como cosa curiosa, que, al mismo tiempo, otra misa solemne se cantaba en las Carmelitas a la llegada de procesión semejante que salía de la parroquia de Santa María  y a ella retornaba. Es un demostrativo dato más de la pugna existente entre esas dos parroquias por mantener la primacía, que a tantos hechos curiosos dio lugar y que vino a concluir, en el pasado siglo, al erigir la iglesia de Santa María del Prado como Catedral del Obispado Priorato de las Órdenes Militares.

Hasta los primeros años de la actual centuria, por la calle de la Palma, desde la plazuela de San Francisco, venía el Nazareno del Jueves Santo. Lástima que el carácter equívoco del vecindario de la Palma motivase la supresión de este trozo de la carrera de las pasionarias de Semana Santa. Hoy, prohibidas las casas de tolerancia, valdría el esfuerzo alargar el itinerario, restaurando el antiguo, porque, en verdad, la subida de las procesiones por la calle Dorada, el paso por la plazuela de S. Francisco y la salida a la calle de la Mata, por la de la Palma, tenía un colorido y un sabor muy siglo XVII, castellano que en otros trozos del recorrido también se va perdiendo.

Julián Alonso Rodríguez. Diario Lanza, jueves 23 de junio de 1960, página 5

En 1960 la Cámara de la Propiedad Urbana construyó el edificio el edificio de esquina de la calle Palma con General Rey

jueves, 21 de noviembre de 2019

EL ANTIGUO EDIFICIO DE MATERNIDAD Y CASA CUNA


 
Vista de la antigua maternidad y casa cuna antes de la última reforma que la convirtió en centro de exposiciones

Dentro de los terrenos del desaparecido convento de los Franciscanos y con cargo al presupuesto de la Diputación Provincial, aparte del Hospicio Provincial, ubicado en la Plaza de San Francisco, el arquitecto Francisco Alonso Martos, levantaría la “Casa de Expósitos” en 1928-1929, con vistas a la Ronda de Granada. Pero este proyecto no se terminaría, por lo que el arquitecto Telmo Sánchez construiría en 1932, una ampliación para maternidad y casa cuna, que es el edificio que actualmente se conserva como Centro de Exposiciones (CEX) de la Diputación Provincial.

Vistas de la maternidad-casa cuna en 1949

Detrás de este edificio, la Diputación Provincial construirá en 1943 el nuevo servicio de maternidad, con cincuenta camas, que es el actual edificio de recaudación provincial, que tras el paso de las competencias en esta materia a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en 1991, el edificio fue adaptado a su nueva función como centro recaudatorio provincial e inaugurado en 1993.

Otra de las instalaciones de la maternidad-casa cuna en 1949

miércoles, 20 de noviembre de 2019

EL HOGAR PROVINCIAL FEMENINO VIRGEN DEL PRADO


Taller de corte y confección de prendas de vestir en el antiguo Hogar “Virgen del Prado”

Desde la llegada de la Hijas de la Caridad al Hospicio Provincial en 1879, estas se harían cargo de la educación de las niñas, que se encontraban en dicho centro benéfico, donde recibían clases de corte y confección, costura y bordado. 

Una de las galerías del Hogar Virgen del Prado

Con la proclamación de la Segunda Republica Española, el hospicio pasa a denominarse Hogar Provincial. Con la llegada de los Salesianos en 1961, estos se harían cargo de la educación de los niños en el hogar “Santo Tomás de Villanueva”, mientras las niñas la recibían en el “Hogar Virgen del Prado”, a cargo de las Hijas de la Caridad.

Taller de costura y bordado

A parte de las clases de corte y confección, costura y bordado, las Hijas de la Caridad también llevaban la educación de las niñas en el Colegio Virgen del Prado, que aceptaba también a niñas no internas en el colegio. Con la entrada en vigor de la Orden Ministerial 14-07-1988, en las dependencias del antiguo hogar y colegio “Virgen del Prado”, se crea el actual colegio Santo Tomás de Villanueva, desapareciendo las Hijas de la Caridad del mencionado centro en 1991.

Niñas del antiguo colegio “Virgen del Prado” en los años sesenta del pasado siglo

martes, 19 de noviembre de 2019

IMÁGENES DE LA ESCUELA-HOGAR SANTO TOMÁS DE VILLANUEVA EN LOS AÑOS SESENTA DEL SIGLO XX



Traigo hoy al blog, unas imágenes de la Escuela-Hogar Santo Tomás de Villanueva de 1961, publicadas en una Memoria descriptiva de las principales características de la provincia, y del funcionamiento y actividades de los diversos servicios dependientes de la Diputación Provincial, que nos acercan la imagen de la Escuela-Hogar en aquellos años.







lunes, 18 de noviembre de 2019

LA BANDA PROVINCIAL DE CIUDAD REAL 1869-1976



En el contexto de la sociedad católica del siglo XIX fue creado el Hospicio Provincial. Su misión era recoger niños huérfanos, abandonados, sin recursos, ejercer la caridad para evitar la marginalidad y mantener el orden social establecido. A este fin fundamental obedecían los presupuestos de beneficencia de la Diputación Provincial, la partida más amplia dentro de las cuentas provinciales. El cuidado y la educación de los niños del Hospicio fue encomendada a las hermanas de la Caridad. El centro funcionaba como un internado y una escuela nacional. Contaba con talleres para preparar a los asilados en un oficio. El rasgo más destacable era la severidad del régimen disciplinario.

La música fue uno de los talleres que primera se implantaron en el Hospicio Provincial junto a la imprenta y la contabilidad). En los reglamentos de 1884 y 1887 quedaba definida la figura del maestro de música y sus funciones: formar individual y colectivamente en la disciplina musical a los asilados, organizar y dirigir la banda del establecimiento. El maestro de música podía recomendar a los alumnos aventajados para posibles becas de la Diputación Provincial. Debía recoger los donativos y gratificaciones que obtuviera la banda, ingresando la mitad en las cartillas de los alumnos músicos, con el fin de que tuvieran unos ahorros a la hora de abandonar el Hospicio.

El primer maestro de música del que conocemos el nombre fue Sebastián Barrajón (dato de 1866). En 1869 ya estaba montada la Banda Provincial, compuesta por 36 músicos. A partir de 1885 fue dirigida por Justo Sánchez Escribano, que estuvo en el puesto hasta 1924. Uno de sus cometidos fue la selección de voces para formar un coro de asilados. En ocasiones Justo Sánchez colaboró con la Catedral (intercambio o unión de asilados con el coro de seises).


1924-1930: una banda infantil muy admirada

Con la dictadura de Primo de Rivera hubo notables cambios en la Diputación Provincial y en las instituciones que de ella dependían (Real Decreto de 12 de enero de 1924). El nuevo diputado visitador del Hospicio fue Ponciano Montero. En su memoria correspondiente a 1924 se mostraba contrario al rigor disciplinario excesivo, dispuesto a fomentar una educación alternativa de índole vital, capaz de convertir a los niños en hombre futuros integrados en la sociedad. En este sentido, inició una puesta al día, mejora y ampliación de los talleres del Hospicio, entre ellos el de música. Las instalaciones fueron mejoradas y se aumentó el presupuesto.

Dentro de esos cambios tuvo gran importancia la rehabilitación de la Banda provincial y la dotación para becas. En 1924, tras las correspondientes oposiciones, Antonio Segura se convirtió en el nuevo director de la banda, demostrando grandes dotes con los niños. Cobraba 2.475 pesetas anuales (casi 15 euros). En 1925 la Provincial ya estaba completamente reactivada, a nivel público, mereciendo todos los elogios de las crónicas locales. Hasta 1930 su actividad fue incesante: procesiones, conciertos, verbenas, salidas a otras poblaciones… Destacó especialmente la actuación en el Teatro Cervantes, 20 de abril de 1926, con el estreno del Himno a la Mancha, obra de Segura. También fue memorable la actuación en el mismo escenario el 19 de diciembre de 1927 (estreno del pasodoble Ruano, del mismo autor). Las últimas actuaciones de la Banda Provincial en esta etapa se produjeron durante la República: concierto conmemorativo del 12 de abril de 1932 y actuación con motivo de la visita de Alcalá Zamora a la ciudad (27 de abril de 1933).


La desaparición de la banda en la Segunda República

En 1932 el nombre de Hospicio fue cambiado por Hogar Provincial. Cuatro años después, en medio de una gran polémica fueron despedidas las hijas de la Caridad, siendo sustituidas por funcionarios de la Diputación Provincial. En el campo de la música, dentro del contexto de la creación de las Escuelas Profesionales del Hogar Provincial (1932), lo más destacable fue la conversión de la banda en un taller de enseñanza artística especial, restringido a nivel interno, lo que suponía el final de la banda, cuyo mantenimiento se hizo demasiado caro. Antonio Segura pasó a ser “profesor especial” y se contrataron nuevos profesores para instrumentos: Eleuterio Romero, Martín Calvillo y Joaquín Bermúdez. Poncio Montero, el artífice de la banda previa, se quejó amargamente de esta política a través de sus “Notas del día” en El Pueblo Manchego”. Ya durante la guerra, en 1937, se hizo una gran reforma educativa (diseñada por Luis Castillo Almena), dentro de la cual la música se afirmaba como “enseñanza especial” con una amplia dedicación dos horas al día.

La Banda Provincial en la posguerra

Terminada la Guerra Civil se acometió una tarea de recomposición de la beneficencia provincial bajo un concepto paternalista. En 1944 el Hogar Provincial sufría una superpoblación preocupante. El funcionamiento de los talleres y las escuelas especiales se hacía imposible, por falta de infraestructuras y recursos. Aún así constan unas oposiciones para elegir nuevo director de la Banda Provincial, puesto que recayó en José Caballero García, en reñida competencia con Cristóbal Ruyra (que ya era director de la Banda Municipal). También fueron contratados Eleuterio Romero Castellanos, profesor de bajo, y Zacarías de la Flor Albacete, profesor de clarinete. Las actuaciones de la banda son muy escasas, lo que prueba su extrema debilidad en estas fechas. En 1946 intervino en el Teatro Proyecciones, en el Cervantes y en el Casino. Desde 1947 a 1953 desaparece del contexto público.


La reactivación de la Banda Provincial en la segunda parte de los años cincuenta

Cecilio López Pastor, periodista de enorme prestigio en la capital, ocupó el puesto de diputado visitador del Hogar Provincial entre 1952 y 1958. Era gran admirador de Ponciano Montero y de su obra. Esa fue una de las razones que le movieron a reorganizar la banda de la institución, para lo cual se requería un gran esfuerzo de profesores y alumnos, que partían de un nivel mínimo. Con Germán Chacón figurando como director, asistido por Eleuterio Romero Castellanos, la nueva Banda Provincial hizo su presentación en el Palacio de la Diputación el día 31 de diciembre de 1954, con motivo de una celebración navideña. En la cabalgata de Reyes de 1955 inicia sus actuaciones en la calle. La agrupación aparecía con un nuevo nombre, dentro del contexto de las juventudes falangistas: Banda del Hogar Provincial Centuria Federico Ruyra.

Hasta 1961 la agrupación provincial estuvo muy activa. Tuvo una estrecha relación con determinadas hermandades de la Semana Santa de Ciudad Real: Hermandad de Jesús Nazareno y Hermandad de Jesús Caído. También era habitual su presencia en las festividades de la Hermandad de San Isidro y de la Hermandad del Carmen. Durante la feria de agosto fue habitual la programación de conciertos, lo cual supuso un avance notable en su repertorio (comparable al de la Banda Municipal). A partir de 1957 está documentada la dirección de José Martín Gil, al menos de forma esporádica. El veterano ex director de la Banda de Infantería de Toledo aportó toda su sapiencia musical a la agrupación. Como profesores destacaron Zacarías de la Flor (clarinete) y Antonio Ruda (saxofón).


El final de la Banda Provincial 1961-1976

A partir de 1961 los datos sobre la Banda Provincial son muy escasos; aparecen escuetamente en algunas de las memorias del Hogar Provincial. En este año la Diputación Provincial firmó un convenio con los salesianos para que se hicieran cargo de la educación en el asilo. A partir de entonces se potenció la formación profesional, al tiempo que disminuía el número de alumnos y el presupuesto provincial destinado a beneficencia. En el diseño de los salesianos la música fue considerada como una actividad formativa y lúdica dentro del Hogar, pero no externa, lo que suponía una disminución drástica de las actuaciones públicas de la banda.

Durante los años sesenta las memorias de la Diputación Provincial dan noticias sobre formaciones instrumentales dentro del Hogar para actividades extraescolares y recreativas, y sobre profesores especiales de bajo, saxo y trombón, a extinguir. A principios de los setenta el Hogar fue dividido en dos escuelas provinciales: masculina y femenina, con alumnos internos y externos. En 1973 se adopta el sistema de la EGB. La Banda Provincial subsiste en informaciones puntuales hasta 1976. En la memoria correspondiente a ese año se afirma que fueron suprimidas todas sus actividades. Consta, aún después, cierta reconstitución del grupo por Antonio Velascoín, porque la institución aún disponía de los instrumentos. Cuando estos fueron donados a distintos ayuntamientos que los habían solicitado (especialmente al de Castellar de Santiago), la posibilidad de reactivación se cerró para siempre. Fue entonces cuando los empleados de la Corporación Provincial quemaron los viejos uniformes de la banda infantil, que se guardaban en un almacén del Hogar.

Vicente Castellanos Gómez. “Musicalerías. Ciudad Real: Música y Sociedad 1915-1965”, páginas 249-255