El Árbol de Navidad o árbol navideño es
un elemento decorativo, típico de la fiesta de Navidad que se decora con
adornos como bolitas de colores de cristal u otro material menos frágil, luces,
estrellas, campanas, lazos, espumillones, guirnaldas u otras decoraciones.
Aunque en España, el árbol de Navidad se cree que es una incorporación de no hace tantos años a nuestras fiestas navideñas, la verdad es que el Árbol de Navidad es de origen germánico y se incorporó al cristianismo en el siglo VIII cuando san Bonifacio, que predicó el cristianismo a aquellos pueblos taló un roble, éste al caer aplastó muchos arbustos, y al haberse salvado un pequeño abeto el santo dijo: “He ahí el árbol del Señor; llamadlo desde ahora árbol del Niño Jesús” (Ecce arbor Domini; vocate illum abies Yhesu).
Desde entonces aquella práctica gozó del favor general, y en el siglo XVIII el árbol de Cristo, el Christbaum
de los germanos, había arraigado en casi toda Europa.
En Ciudad Real tenemos constancia que a finales del siglo XVIII, ya se ponían árboles de navidad. En una partida de defunción de la Parroquia de Santiago del año 1795, siendo párroco D. Sebastián Almenara, se hace constar la donación de 12 reales para el Árbol de Navidad. Es en la partida de defunción de Manuel Galiana, natural de Daimiel y vecino de nuestra ciudad, que fue enterrado en la capilla de Nuestra Señora del Rosario del desaparecido convento de los dominicos de Ciudad Real. Sabemos que era hermano de la Hermandad de Ánimas de la Parroquia de Santiago, muriendo sin descendencia dejando sus bienes a su hermano y sobrinos. En la partida de defunción existe una nota marginal que dice lo siguiente: “Diéronse por el Arbol de Navidad 12 reales”, que demuestra que en el siglo XVIII, ya se ponían árboles de Navidad en Ciudad Real.
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