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viernes, 31 de marzo de 2023

AL INSPIRADO ESCULTOR DE LA DOLOROSA, SR. CASTILLO LASTRUCCI

 




Desde el año pasado, cuando nos vimos en nuestra Procesiones Pasionarias ante una imagen improvisada, de la Dolorosa, se nos dijo que este año saldría otra de nuestra construcción, tallada por uno de los mejores Escultores de Sevilla.

Al iniciar nuestro folleto de propaganda hemos querido ilustrarlo con los clichés de las imágenes que este año han de salir procesionalmente, para lo cual nos hemos puesto al habla con el Hermano mayor, D. Hilario Richard, quien con la alegría del que ve realizada una ilusión, nos recibe cariñosamente y trasladándonos a presencia de la imagen, instalada provisionalmente en la capilla del Hotel España (antes Gran Hotel) nos dice ¡Ya tenemos Dolorosa! ¿Qué os parece?

-Nos gusta; nuestro juicio es que gustará. Se ve no es una figura más, hecha en serie como tantas, no; sino una escultura estudiada observada, que tiene vida, “que habla”. Tiene en el rostro un rictus de amargura, un halo de tristeza en el semblante, expresión de “algo” que pasa por el fondo de su alma, herida por el dolor de la tragedia a que han sometido a su Divino Hijo. Diremos que su autor ha puesto en ella su sentimiento de artista, en el que deja ver la discreción, el respeto a lo viejo, a lo consagrado, a la vez que su buen gusto.

-…Está hecha por el gran escultor D. Antonio Castillo Lastrucci, hombre sencillo que allá en su taller de la calle de San Vicente, 52, de Sevilla, calladamente, modestamente, como hormiga laboriosa, trabaja y produce sin cesar. Es el autor de varios “pasos” e imágenes de la Procesiones Pasionarias de la Semana Santa Sevillana, entre otros el de la Presentación de Jesús al Pueblo, tal vez el más feliz de los suyos; el de la Bofetada, el de San Esteban, aquella bella y armónica composición del “paso” de la Sentencia de Cristo, y aquel Cirineo, tan expresivo, tan patético del Nazareno de las Tres Caída, de la Esperanza trianera. Entre otros trabajos, hace poco terminó una bellísima Concepción para la Iglesia de este nombre, de Huelva, para la que también hizo, algún tiempo antes, una Oración del Huerto; otra para las Concepcionistas de Málaga. Una Piedad, para Guadix, con el Señor en los brazos, imitación de la de Salcillo, destrozada por los marxistas. Un corazón de Jesús, para Alosno. Varios Nazarenos para Villarrasa, Bujalance, lora y otros. Un Cristo de la Humildad para Mairena y un Crucificado para Gibraleón.

De lo más inspirado del Sr. Castillo Lastrucci es el Cristo de la Buena Muerte, para la Cofradía de la Iniesta, de San Julián, de Sevilla. Para este trabajo se promovió un concurso entre Escultores presentando bocetos varios de los más notables, siendo elegido el del Sr. Castillo por considerar ésta acaso su obra más acabada y sentida.

Y dejamos de enumerar otros muchos trabajos, por el reducido espacio a que nos tenemos que ajustar, felicitando al Sr. Castillo Lastrucci por su acertada obra de nuestra Virgen de los Dolores.

 

Los Editores, Folleto de la Semana Santa de Ciudad Real de 1941. Tipográficos ALPHA. Calatrava, 5 Ciudad Real




jueves, 30 de marzo de 2023

CARTELERÍA DE LA SEMANA SANTA DE CIUDAD REAL 2023

 

Cartel Oficial de la Semana Santa editado por la Asociación de Cofradías


Hermandad de las Palmas


 
Hermandad de la Coronación de Espinas


Hermandad del Prendimiento


Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno (Medinaceli)


Hermandad de Nuestra Señora de la Esperanza


Cofradía de la Flagelación


Hermandad del Silencio


Hermandad de la Santa Cena


Hermandad del Ecce-Homo (Pilatos)


Hermandad del Santísimo Cristo de la Caridad


Hermandad de Nuestra Señora de los Dolores de Santiago


Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno


Hermandad de la Oración en el Huerto


Hermandad el Encuentro


Hermandad de Nuestro Padre Jesús Caído


Hermandad del Santísimo Cristo del Perdón y de las Aguas


Hermandad de la Santísima Virgen de la Misericordia


Hermandad del Santísimo Cristo de la Piedad


Hermandad del Santo Descendimiento


Hermandad de Nuestra Señora de las Angustias


Hermandad Nuestra Señora de los Dolores “Ave María”


Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad


Tertulia Cofrade Codal de Plata


Tertulia Cofrade Cruz de Guía


Programa de radio "El Muñidor de COPE"


Bar El Rincón del Cofrade


miércoles, 29 de marzo de 2023

MI OPINIÓN COFRADE: NECESITAMOS COFRADES COMPROMETIDOS

 



Cuando los cofrades comprometidos se convierten en cofrades de Semana Santa, han cruzado la delgada línea que separa el vivir con las vivencias. 

Nuestra Semana Mayor está falta de cristianos, falta de gente, falta de cofrades que se comprometan de verdad con sus hermandades, desde la ayuda al prójimo hasta la salida por la puerta de la iglesia en su día grande, pasando por comprensiones, trabajo y un esfuerzo, que seguro Él nos sabrá recompensar cuando llegue el día en que tengamos que rendirle cuentas bajo el altar desde donde veamos toda nuestra vida cofrade bajo nuestros pies.

¿Qué le ha pasado a la Semana Santa de hace unos años, donde el fervor de los jóvenes sustituía a la actual desidia de ellos y donde sobraban las manos en el trabajo?

Las hermandades no dejan de estar integradas por personas, aunque de vez en cuando se nos olvide, y son muchos los factores que influyen y configuran la Semana Santa que hoy en día conocemos.

Nos adaptamos a nuevos modismos, a nuevas formas de interpretar una tradición anclada en lo más profundo del sentir popular de nuestra tierra. Y es curioso, pero estos tiempos de cambio, de permanente evolución, no son contrapuestos a dicha tradición.

Pero, ¿sabemos utilizar todo aquello que consigue llamar nuestra atención, para encauzar el sentimiento, la fe, que da sentido al testimonio que exponemos en la calle? Como cofrade, disfruto, me enorgullezco de que, de unos años hacia acá, nos acordemos de nuestras hermandades más de un único día al año. Ensayos de costaleros, cuadrillas de jóvenes y no tan jóvenes que noche tras noche en días de frío invierno, se reúnen para dignificar el Misterio de la Pasión, Muerte y Resurrección que representamos el día de nuestra salida procesional.

Todo esto ha de ser motivo de orgullo para todos nosotros. Pero, en momentos en los que reflexionamos acerca de la salud de nuestras hermandades, nos hace falta (el primero, un servidor) ponernos la mano en el pecho.




¿Se ha convertido este “mundillo” cofrade, en una mera afición que va de la mano de formas de andar, de estilos de una u otra banda, de imagineros, bordadores y orfebres de renombre? ¿Lleva de la mano, esa evolución en lo que muchos llaman cultura cofrade, la comunión y la confirmación en unas creencias? ¿Nos acerca a participar activamente en los cultos de nuestras hermandades? ¿Nos reafirma en aquello que representamos tan activamente cuando ponemos una Cruz de Guía en la calle?

Estamos a tiempo de decir la última palabra, de dar sentido a aquello que manifestamos. De hacer un ejercicio de honestidad cristiana, de dar el paso al frente, de ser ejemplo dentro de la comunidad cristiana, de demostrar que utilizamos los elementos que engalanan nuestra puesta en escena, para llegar al prójimo, para llenar las iglesias, para acercar al Sagrario a esos jóvenes que se encuentran perdidos en esa nube de incertidumbre cotidiana.

Y es que nadie te dijo que fuera a ser fácil, cofrade, pero en las cofradías y hermandades de Ciudad Real necesitamos cofrades comprometidos con su hermandad. 

A cuatro días del Domingo de Ramos, nos toca de nuevo llenarnos de Dios, de su hijo, de su madre.  Volver a transmitir el mensaje más hermoso de Amor que se nos ha legado, alumbrando su camino por las calles, guiando los pasos de nuestros hermanos, adornando de música triunfal los desfiles o sufriendo el peso debajo de una trabajadera.

Cofrade, no tengas miedo a mostrar lo que sientes al llegar el día y salir a las calles de Ciudad Real. Que todo el mundo pueda ver la alegría que el espíritu nos transmite dentro. No te quedes en lo superficial, ora, contempla y agradécele a Dios. Solo así daremos verdadero testimonio catequético de fe. Y cuando pasen los días santos, acércate por tu hermandad, por las actividades y cultos que realiza, porque las veinticuatro cofradías penitenciales de nuestra ciudad, necesitan de cofrades comprometidos.

Dejo como reflexión están breves palabras y que cada uno se aplique la historia a su vida misma, analizando sus fallos y sus aciertos que está teniendo con nuestra Semana Santa, sus cofradías y hermandades.



martes, 28 de marzo de 2023

LA SEMANA SANTA NECESITA DE LA AYUDA DE TODOS

 



Nos referimos, claro está, a la Semana Santa externa, la de las procesiones, que le ha dado justa y merecida fama a Ciudad Real, en una progresión que realmente es estimable, si la comparamos con el número de habitantes y la capacidad económica de la capital. De la otra Semana Santa, la interna, la litúrgica, no creemos necesario hablar ni escribir, pues en el ánimo de todos está su cada vez mayor asistencia a los templos en los Oficios de la Semana Mayor, desde el Domingo de Ramos hasta el de Resurrección. El fervor, la religiosidad de nuestro pueblo se traduce en millares de comuniones y en ininterrumpidas visitas a los Sagrarios, que en estos días de Semana Santa alcanzan el máximo nivel.

Ya decimos que de la Semana Santa que queremos ocuparnos es de la procesional, para nosotros de nos menos importancia que la interna, pues representa una exteriorización de cómo el pueblo español siente el Drama Sacro de la Pasión de Cristo. En Ciudad Real -lo hemos dicho en más de una ocasión- el esfuerzo de unos hombres, galvanizando iniciativas y recogiendo colaboraciones, han logrado colocar nuestra Semana Santa a una altura muy superior a la que tenía el año 36, con ser ya entonces muy estimable. Se aumentaron el número de procesiones y el de Hermandades, se mejoró la categoría artística -en general- de los “pasos” y sobre todo de los tronos, se completó el número de túnicas y las colecciones de estandartes y atributos. Ahí están los desfiles del Domingo de Ramos y Martes Santo, la nueva Cofradía de la Santa Cena, integrada por estudiantes, y, sobre todo, la procesión de Jesús Resucitado, grandiosa, magnificente, recopilación lucidísima y exponente brillante de nuestras Hermandades, que en la mañana luminosa del Domingo de Resurrección, cierra con broche aureo de músicas y pólvora el recogimiento y orden, unánimemente reconocidos, de las procesiones de la capital de la Mancha.




Pero la Semana santa tiene que ir hacia arriba, en progresión sucesiva, como anhela y requiere el entusiasmo de los directivos de las distintas Cofradías. Y para ello es preciso la colaboración de todo el vecindario, correspondencia obligada de quienes se ufanan de  contar con unas fiestas pasionarias que pueden muy bien compararse con las de otras ciudades de mayor población y por ende de más amplia base  económica. Esta ayuda tiene que surgir espontánea, canalizada no obstante a través de las distintas Hermandades cuando se nos invite a formar en las mismas, y de la Comisión Permanente o de la Asociación de Cofradías, cuando se nos pida un donativo con que subvenir a los cuantiosos gastos que se originan.

En la reciente reunión del Pleno de la Asociación de Semana Santa se nos dijo ya que ha habido que prescindir de contratar una banda militar, que indudablemente da realce y porte a nuestras procesiones de Jueves y Viernes Santo. Si este año ya no fuera factible, que nos sirva de lección para los sucesivos. No es posible, sin la colaboración de todos, por mucho que se esfuercen las Hermandades, mantener el rango de nuestras procesiones. Y si parece que esa mayor colaboración ha de llegar del Comercio, Industria y establecimientos de Hostelería, que éstos respondan al llamamiento, pero que los demás tampoco se crean relevados de entregar su aportación.

 

Cecilio López Pastor. Revista Semana Santa Ciudad Real, abril de 1965

 



lunes, 27 de marzo de 2023

ANTE LA SEMANA SANTA: HABLA PARA LANZA EL NOTABLE ARTISTA DECORADOR, PEPE MUR

 



La procesión de Don Federico—Sugerencias sobre los “pasos” de nuestras pasionarias—Proposición a la Junta Permanente pro-Semana Santa—Podemos imitar a Sevilla y Málaga

 

SENSACIÓN DEL MOMENTO

Son las doce de la mañana de un magnífico día marceño, que pudiéramos decir otoñal, y las principales vías que afluyen al centro de nuestra capital, rutilantes de luz, como un canto al Sol, ofrecen bellísimo y encantador aspecto.

Los típicos soportales de la Plaza del Generalísimo, llenos de un público heterogéneo, ponen una nota policroma de una ciudad andaluza. Es la hora cotidiana del paseo de este domingo, en el cual se borran diferencias personales, olvidos y pecado, rescatando y afirmándose amistades, con las que se comentan las palpitaciones de la vida local y hasta mundial, con sus sensaciones del momento.

El repórter tiene la suerte de encontrar a quien buscaba, a Pepe Mur, a este exquisito artista, que entre todas sus obras, verdaderamente notables, preponderan su honda espiritualidad en un profundo sentir religioso e impregnadas de secreto místico.

Pepe, al que abordamos inmediatamente, nos dice a nuestras preguntas:

 

RECUERDOS DE ANTAÑO

-¿…?

-Recuerdo mucho a Don Federico y con él a su magnifica Hermandad.  Fui el autor de aquellos grupos de la Pasión, de aquel Jesús con la cruz a cuestas y con su Cirineo; del Ecce-Homo etc., etc.

El amigo. Don Francisco Herencia sabe muy bien cuánto trabajé por su Cofradía y no menos, cuando fue Alcalde de Ciudad Real, organizándole con gran suntuosidad y originalidad, “La Fiesta de la Reina de la Feria”.

 



LOS PASOS ACTUALES OBJETO DE REFORMAS

-¿…?

-Es verdad. El modelo de túnicas, de la llamada “Cofradía del Comercio” es original mío, que por cierto, se distingue de todas las que lucen otras Hermandades, pues el modelo es un manto o capa, pero es una pena que continúen con la misma clase de tela de escapulario, sin forrar, ya que le quitan la parte artística.

-¿…?

-Efectivamente. Ya le indiqué a Ramón González, que para no gastar dinero en un nuevo Santo Sepulcro,- que por cierto el mismo Jesús yacente, era magnifico y de gran talla-, se le quitara la urna de cristal, haciéndole un Vía-Crucis, con unos angelotes de pie, un gran foco, dentro de la corona y una candelaria sobre la carroza. Pues bien, ahora está el “paso” a oscura, altísimo, que sólo se ve desde los balcones y además tiene poca amplitud denunciando la falta de una carroza de grandes dimensiones, para colocar en ella, candelabros.- nada de luces indirectas.

-¿…?

-Los faroles del Cristo de la Caridad estupendos, pero al “paso” se le podría mejorar en su parte artística.

-¿…?

-Otro tanto cabría hacer con el de la Dolorosa de Santiago. Hace falta más palio. Podían copiar de palios de otras capitales. Con bordados, puntillas de oro y grandes flecos si sobre estos de tisú, con menos luz de la cara de la imagen que la hace descolorida, siendo una pena, ya que la escultura es muy bonita.



-¿…?

-El Cristo de la Piedad fue magníficamente presentado en las pasionarias del año pasado, ¡Aquellos claveles rojos!

-¿…?

-Me encargaron, con precipitación de momento, siete estandartes, representando los dolores de la Virgen, que los pinto el amigo Richard, encargándome yo de dirigirlos, en un improvisado taller. Creo fue un éxito, además por el alumbrado tan original de la carroza.

-¿…?

-La Cofradía de la que es Presidente, Enrique Pérez, “La Soledad”, es de las más vistosa de nuestra Semana Santa, indudablemente. Sin embargo, yo me comprometería a realizar grandes reformas en el trono de la imagen.

Hace falta mucho que realizar para conseguir un fastuoso desfile procesional y con él una semana entera que atraiga al forastero, como en Sevilla, Málaga, etc., etc.

 

BRINDANDO UNA IDEA

-¿…?

-Yo me permito insinuar a la Junta Permanente Pro-Semana Santa de Ciudad Real, como sería el orden de los desfiles.

Domingo de Ramos procesión de las Palmas. Lunes, procesión del Niño Perdido, con asistencia de todos los alumnos de las Escuelas nacionales y comedores de Auxilio Social, todos ellos con túnicas confeccionadas por la Sección Femenina. Martes, procesión de los Cinco Misterios dolorosos. Miércoles, la pasionaria de los Ex-combatientes, haciéndola de carácter provincial creyendo que les corresponde como patrono un Cristo de la Victoria y una gran Cruz con el escudo de España, orlado de los diversos Cuerpos del Ejército que ganaron la guerra. Jueves las procesiones de Santiago y visita a Monumentos. Viernes, el magno desfile que cada año adquiere más vistosidad con el majestuoso “paso” de “El Encuentro” y ya en la noche, el del “Silencio” todo penitencia y antes la de Jesús Nazareno, tan típica y tradicional.

 



El sábado, instituiría la procesión del Resucitado, figurando en ella la Comisión Pro-Semana Santa, con representaciones de las Hermandades, y todos descubiertos.

-¿…?

-El domingo de Resurrección -díselo a tu compañero “Sangre y Arena”, verás como aprueba mi idea-, en la tarde de este día, organizaría una corrida de toros, con primeras figuras de la baraja taurina, no sin antes, en la mañana del citado domingo. -¡para dar gusto a todo el mundo!- contendiesen en el Estadio dos equipos de fútbol de primera categoría.

Hoteles, bares y comercios en general, contribuirían con cantidades de consideración. ¿No te parece?

-Continúa la esplendidez de la tarde y la “Charla” con este artista, tan admirado en Ciudad Real, se prolonga demasiado. No queremos molestarle más.

Un apretón de manos y hacemos punto a nuestro interrogatorio.

 

Pedro Barrio. Diario “Lanza”, sábado 15 de marzo de 1947



domingo, 26 de marzo de 2023

DERIVACIÓN Y SEMEJANZA DE LOS FAROLES DEL PASO DE NUESTRO PADRE JESÚS NAZARENO CON LOS DEL GRAN PODER DE SEVILLA

 

Nuestro Padre Jesús Nazareno en la tarde del Domingo de Pasión



La Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder de Sevilla, siempre ha sido fuente de inspiración para otras tantas cofradías de España, siendo con la Hermandad de la Macarena, de las cofradías más imitadas por toda la geografía nacional.

Sin duda, una de las piezas más repetida y seguramente una de las más características que posee la línea artística de la cofradía, sea el juego de cuatro faroles que iluminan el paso del Señor.

Los cuatro faroles procedentes de la artesanía cordobesa, estrenados el 17 de abril de 1908, salidos del taller de Rafael León, presentan una traza de estilo rococó y perfil hexagonal, de silueta muy estilizada y absolutamente inconfundible que, si bien no resulta original, están a su vez inspirados en los mismos que iluminan el paso de la urna, de la Hermandad del Santo Entierro, de Écija, que realizara en 1765 el también cordobés y maestro de la platería, Damián de Castro (1719-1793).

El gran acierto del Rafael León radicó en estilizar la forma de aquellos faroles, dándoles una gracilidad y una armonía que los convirtieron rápida y definitivamente en referente estético para muchas hermandades tanto de Sevilla como del resto de España.


Los faroles del Gran Poder sevillano



En el año 1949, siendo Hermano Mayor de la ciudarrealeña Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, D. José Saúco Gabaldón, se adquirieron a través de la “Casa Mur” de Ciudad Real, los cuatro faroles que posee actualmente el paso del Nazareno.  El Hermano Mayor en la entrevista que le realizaron en el citado año, para el diario “Lanza”, días previos a Semana Santa decía lo siguiente: “…alrededor del segundo cuerpo de las andas se han puesto unos brazos para la ante dicha iluminación que junto con los cuatro faroles que este año estrenará el “paso” iguales a los de Jesús del Gran Poder de Sevilla, y que tienen un metro de altura, constituirán el alumbrado del paso”.

Efectivamente, los faroles del paso de Nuestro Padre Jesús Nazareno ciudarrealeño, que procesiona hoy Domingo de Pasión, y la madrugada del Viernes Santo desde la Parroquia de San Pedro, están inspirados en los del paso del Gran Poder Sevillano. Estos  faroles siempre han acompañado a la imagen de Jesús Nazareno desde su adquisición en 1949, en los diferentes pasos con los que ha contado la hermandad, aunque en un principio fueron dorados, actualmente están bañados en plata.

 

Nuestro Padre Jesús Nazareno en la Madrugada del Viernes Santo


sábado, 25 de marzo de 2023

ANTIGÜEDAD DE NUESTRAS COFRADÍAS

 



En nuestra católica España eran las Cofradías o «Hermandades de legos», piadosas asociaciones de laicos que se proponían como fines: primero, el cumplimiento más intenso y exacto de sus deberes religiosos, pero en comunidad; y después, prestar su cooperación al clero en las funciones y ejercicios del culto. Eran, en consecuencia, una especie de órdenes religiosas de seculares, que usaban trajes especiales en las solemnidades públicas, llevaban insignias propias y contribuían de una manera directa a dar solemnidad a los actos del culto y a participar en las procesiones eclesiásticas.

Estas Hermandades servían, pues, como medio de enlace entre el estado laical y el religioso, entre la vida secular y la vida regular, y el gran desarrollo que lograron en los siglos XVI y XVII no fue más que una resultante lógica del intenso y frecuente culto de los Santos, que se fomentó a raíz de la Contrarreforma, es decir, a consecuencia de la verdadera Reforma de la Iglesia establecida en el Concilio Tridentino.

Los disciplinantes españoles de esta época, que hay que distinguir de las demás sectas europeas de flagelantes, con sus mortificaciones y penitencias, antecedente directo de las procesiones de Semana Santa, no son otra cosa que una adaptación al estado laical de las maceraciones, cilicios y disciplinas que se practicaban en los conventos desde siglos antes. Estas penitencias y ejercicios de mortificación, ya fuera en las Iglesias o en otros lugares, pero siempre en el seno de las Cofradías, y que solían realizarse en forma de procesiones o de rogativas públicas, eran muy frecuentes en aquella época, como se deduce claramente del pasaje del Quijote (1,52), en el que Cervantes describe una procesión de disciplinantes.

 


Ciudad Real no podía constituir una excepción en la España de entonces. Y ya desde el siglo XVI hay noticias ciertas de la Hermandad del Santo Cristo del Perdón y de las Aguas, cuya última advocación adoptó al haberse celebrado una rogativa en cierto año de gran sequía y caído durante la procesión las primeras gotas sobre la imagen del Santo Cristo. Síguele, quizás, en antigüedad, la Hermandad de Jesús Nazareno y la del Santo Sepulcro, establecida esta última en Santa María del Prado y cuyo Hermano Mayor «obsequiaba con un moderado refresco».

En un notable trabajo de investigación, la Srª. Dª. Isabel Pérez Valera de López-Salazar, ha demostrado que gran parte de nuestras Cofradías de Semana Santa tienen una antigüedad mayor que la que se hace constar en folletos y guías divulgadoras. En el capítulo 11 de su obra «Ciudad Real en el siglo XVIII» da noticia detallada de la existencia de veintinueve Cofradías, once de las cuales desfilaban en las procesiones de Semana Santa.

Además de las citadas, ya existían entonces las de la Enclavación, Descendimiento y Nuestra Señora de los Dolores. La primera, desgraciadamente desaparecida y aún sin restaurar, celebraba una función de honras con su «Quadrante de Misas para los Hermanos vivos y difuntos» y los gastos de merma de cera de la procesión, que ascendían a unos 250 reales, los pagaban entre todos los Hermanos. En cambio, en la Cofradía de la Dolorosa, «el Hermano Mayor sufragaba de su caudal los gastos... de 400 reales o 500, a que ascendía la Misa, sermón y pólvora».

 


En la Hermandad del Misterio de la Oración del Huerto, radicada en la Parroquia de San Pedro, el gasto era menor, unos 150 reales, y el «leve refresco» se celebraba el Domingo de Ramos.

En la Parroquia de Santiago había por entonces dos Hermandades del Santo Ecce-Homo: una, en la que los cofrades costeaban cera, procesión, función y Misa y solamente el refresco era obsequio obligado del Hermano Mayor, y otra, la del «Santo Ecce-Homo sentado», con reglamentación similar. En la misma Parroquia ya estaba fundada la Hermandad del Santísimo Cristo de la Caridad, cuyos componentes asistían en corporación al Salmo del Miserere que se cantaba los miércoles de Cuaresma, y tenía la particularidad de que los Hermanos Mayores eran dos y pagaban a medias los gastos de la procesión del Jueves Santo.

Por último, también existía en el siglo XVIII la Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad, establecida en el desaparecido Convento de San Francisco. Aquí, la función religiosa se costeaba con las limosnas de los fieles.

Estos valiosos datos, aún poco conocidos, que hemos entresacado de la meritísima obra citada, demuestran que la investigación sobre la Historia de nuestras Cofradías y procesiones de Semana Santa contribuirá al mejor y más completo conocimiento de la Historia misma de Ciudad Real. Tal es la compenetración secular entre nuestra capital y sus más veneradas instituciones religiosas.

 

Francisco Pérez Fernández. Revista “La Pasión”. Semana Santa Ciudad Real 1962



viernes, 24 de marzo de 2023

EL AYUNTAMIENTO DE CIUDAD REAL ADQUIERE EL CONVENTO DE LAS TERRERAS PARA USO TURÍSTICO Y SOCIOCULTURAL

 



El Ayuntamiento de Ciudad Real celebró ayer una Junta de Gobierno Local extraordinaria para hacer efectiva la adquisición del convento de las Madres Concepcionistas Franciscanas de la capital de la provincia, más conocido como de las Terreras. Este convento del Siglo XVI, declarado Bien de Interés Cultural en 1991, lleva vacío desde 2008, cuando la falta de vocaciones provocó que las dos únicas monjas que quedaban se trasladaran a otro convento que la orden tiene en Osuna (Sevilla). Desde entonces, el monasterio mantenía sus puertas cerradas.

 



El Ayuntamiento de Ciudad Real aprobó ayer la adquisición del convento por un valor de 2,2 millones de euros, en cuya compra se incluye el retablo de la antigua capilla. Posee una superficie construida de 3.500 metros cuadrados en una superficie de 6.000 metros cuadrados. Una importante noticia para la ciudad, para un espacio en el que se plantean diferentes proyectos turísticos o socioculturales, así como otras posibles opciones como futura hospedería. La alcaldesa de Ciudad Real, Eva María Masías, indicó que “con esta adquisición, el convento de las Terreras pasará a formar parte del patrimonio de la ciudad y servirá para la rehabilitación del entorno, creando una oportunidad para la creación de puestos de trabajo e incentivar la inversión en Ciudad Real”. Explicaba que “desde la gestión pública debemos fomentar la conservación de nuestro patrimonio cultural e histórico y eso es lo que estamos defendiendo desde este equipo de gobierno”.




El Convento de la Inmaculada Concepción o Monasterio de Concepcionistas de Sta. Mª Beatriz de Silva de Ciudad Real, en honor a la madre fundadora de la Orden de la Inmaculada Concepción, fue construido en el siglo XVI combinando formas del último periodo del gótico con elementos renacentistas. El conjunto se compone de una iglesia, un convento de clausura y los jardines. La iglesia se sitúa en el lado oriental de la plaza de la Inmaculada, es de planta basilical, de una sola nave y dividida en cuatro tramos.