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viernes, 8 de julio de 2022

EL BARRIO DE PÍO XII ES YA UNA REALIDAD

 



Problema, y problema agudo, es el de la vivienda, por el que canto se está trabajando y del que todos nos preocupamos porque, esta es la verdad, la mayoría nos encontramos dentro del mismo Ciudad Real, como todas las provincias de nuestra geografía, está falta de viviendas y de la reconstrucción de muchas de las que actualmente existen en los extremos, e incluso, en el centro de la capital, muchas de las cuales no reúnen las condiciones reglamentarias de salubridad. No cabe la menor duda de que el Barrio de Pio XII ha contribuido positivamente en esta descongestión de Ciudad Real, necesaria ante la falta de pisos, sobre todo para los nuevos matrimonios. Muchas familias se han trasladado a este popular barrio, un rincón más de la Mancha, que ha nacido principalmente porque un hombre puso, pone y seguirá poniendo todo su entusiasmo por nevar a cabo totalmente una idea que entonces parecía irrealizable por las dificultades que le rodeaban. Don Rafael Rumín, un auténtico hombre en todo el sentido de la palabra, emprendedor y trabajador. El señor Rumín ha sabido por méritos propios granjearse la admiración de Ciudad Real entera, dándonos todo un curso de lo que puede conseguir la voluntad, cuando esta no desmaya pese a muchos obstáculos que se encuentre.

Nos encontramos en el Barrio de Pio XII, en las oficinas de la Hermandad Ferroviaria, y empezamos la entrevista, que vamos a dividir en tres facetas:

 

PASADO

 

 - ¿Cuándo surgió el Barrio de Pio XII y de quien partió la idea, señor Rumín?

-En el mes de septiembre de 1956 se fundó la Cooperativa de Viviendas, y un año después, concretamente el domingo 22 de septiembre de 1957 se colocó la primera piedra para edificar el barrio al que se le puso el nombre de Pio XII. Voy a hacerle algo de historia sobre cómo surgió: Cuando yo llegué a la Hermandad Ferroviaria, sus hermanos me hablaron de viviendas, y yo me hice eco de su petición y pensé detenidamente si había alguna posibilidad para poder llevarla a cabo. Por aquella época, marché con mi familia de vacaciones a casa de unos familiares de Valencia, y como en dicha capital ya existía una Cooperativa de Viviendas de la Hermandad Católica Ferroviaria, me fui a hacerles una visita para que me informaran como era su funcionamiento, pues desde esos momentos, en los que me di cuenta de la necesidad de la construcción de viviendas, no dejo de martillearme la idea de hacer una realidad el Barrio de Pio XII.

 



- ¿Qué fines principales perseguía usted?

-Formar una gran obra social y construir un pueblo más dentro de la Mancha, que llevo dentro de mi propio corazón.

- ¿Fue considerada su idea por algunos como un tanto quimera?

- Por algunos, no por muchos. Pero yo continué luchando con fe y entusiasmo en el logro de mi obra, pidiendo a Dios que se viera cumplidas.

- ¿Con que cantidad de dinero se empezaron las primeras obras?

-Esto tiene una contestación muy rápida: con ninguna. Se firmaron cuatro efectos a vencimiento fijo, por valor de pesetas 450.000, para la compra de terrenos que era lo primero que teníamos que tener para el proyecto de la edificación de viviendas. Reunimos 75.000 pesetas como aportaciones iniciales, y otras 10.000 que nos entregó nuestro querido señor Obispo para la ayuda de esta "locura" como entonces calificaron muchos señores.

- ¿En qué pilares se apoyó su idea para que pudiera ser realizada?

-En la ayuda de Dios y el apoyo de los gobernadores civiles que a partir de don José María del Moral, se han sucedido en el mando de la provincia, así como los delegados provinciales de Sindicatos y de la Vivienda señor Maldonado Cocat. El impulso inicial nos lo dio el entonces ministro de la Vivienda, señor Arrese.

- ¿Con que otras dificultades tropezaron?

-Creo que esta pregunta queda contestada con lo expuesto anteriormente. Todas las obras netamente sociales como es la nuestra, de hecho deben tener grandes dificultades, que con fe y entusiasmo se vencen, y si no las tuvieran no podrían llamarle social.

 

PRESENTE

 

- ¿De cuántas viviendas consta el Barrio de Pio XII?

-Hasta el momento, de 604.

 



- ¿Qué cantidad de dinero se ha empleado hasta la fecha?

-Muy cerca de los ochenta millones de pesetas.

-A su juicio, ¿hasta qué punto ha colaborado la Cooperativa de Viviendas protegidas para solucionar el problema que existe en Ciudad Real?

-Las pruebas están a la vista. En el Barrio de Pio XII habitan actualmente más de tres mil personas. Creo que hemos legrado nuestro objetivo, sinceramente.

- ¿Hay algo más, en lo que se haya basado para ofrecernos esta extraordinaria realidad como es el Barrio de Pio XII?

-En el amor a mis semejantes. Pensando en que puedo proporcionarles bienestar no ceso de trabajar cada día cori más ganas y fuerzas.

- ¿Los precios de los pisos, como así mismo la forma de pago, hacen honor a su condición de viviendas protegidas, estando al alcance de las familias consideradas económicamente débiles?

-En el Barrio de Pio XII casi todos los padres de familia son obreros, toda vez que nuestro fin es que los pisos cuesten- lo menos posible, dando las máximas facilidades para amortizarlos. Por este motivo, en más de una ocasión hemos hecho honor a nuestra leyenda de Quijotes, a cambio de sufrir muchos dolores de cabeza.

 

FUTURO

 

- ¿Continuará usted por mucho tiempo como presidente, señor Rumín?

-Cuando termine la etapa de construcción total del Barrio de Pío XII, paralelamente terminará mi mandato, toda vez que entra dentro de mi pensamiento el darle paso a otros valores jóvenes para que nos traigan ideas nuevas.

- ¿Qué proyectos tiene a la vista?

-Nosotros no tenemos punto fijo, nuestra meta es la de seguir haciendo casas mientras sean necesarias, y hoy, por desgracia las demandas superan a las realidades.

 



-Cuando llegue el día en que se agoten los terrenos para la edificación en la Barriada de nuevas viviendas. ¿Se trasladarán a otros puntos de las afueras de nuestra capital? O ¿la Hermandad Ferroviaria solo abarcará el Barrio de Pío XII?

-Nosotros no miramos el sitio, sino las necesidades existentes, y donde estas sean más agudas, allí nos trasladaremos.

-Se ha hablado de la instalación de una Estafeta de Correos ¿qué hay de cierto en ello?

-Se están haciendo las gestiones reglamentarias, aunque no puedo adelantar en que terminarán.

- ¿Cuándo será una realidad la Avenida de Pío XII?

-Según nos ha informado nuestro Alcalde, en fecha muy próxima, por lo adelantado de su pavimentación.

- ¿Está la Barriada lo suficientemente dotada de escuelas, sitios de recreo, tiendas y teléfono público, de acuerdo con las necesidades entre sus habitantes?

-Tenemos conocimiento por nuestras autoridades, que pronto se empezarán las obras de un grupo escolar. En cuanto al teléfono, la Compañía telefónica tiene tendida ya la red en la tercera fase, pues la primera y segunda gozan de este servicio tan importante. Sobre las tiendas y mercados, también contamos con doce locales comerciales en el grupo próximo a entregar para la instalación de tiendas de comestibles y otras Clases de negocios. Los otros dos grupos están lo suficientemente dotados y cubren muy holgadamente las necesidades generales. Referente a algo no menos importantes como son los lugares de recreo, tenemos en proyecto para, en fecha muy próxima, construir campos de fútbol, baloncesto, tenis, etc. Y otros sitios que sirvan de sano recreo a los niños de corta edad para que puedan jugar al aire libre sin temor a los peligros de la circulación, al mismo tiempo que apartamos de sus respectivos padres una gran preocupación.

- ¿Cuándo se procederá a la entrega de las llaves del tercer grupo de viviendas práctica mente terminado?

-Ya nos hemos puesto al habla con el Excmo. gobernador civil, y puedo adelantarle que para mediados del próximo mes de octubre.

- ¿Alguna cosa más, don Rafael?

-Dar las gracias a todos los vecinos por la colaboración que prestan para que nuestro barrio de Pio XII sea espejo de otras provincias españolas. Agradecer una vez más a todos cuantos nos han ayudado, como así mismo dedicar unas palabras de aliento a los componentes de la Junta Directiva, en los que he encontrado unos auténticos trabajadores y caballeros.

Esto es lo que nos ha dicho el señor Rumin. Pedimos sea creada la medalla de Pio XII, para que el señor Rumín la lleve colocada un a su corazón.

 

Diego G. Ayllón. Diario “Lanza”, martes 28 de septiembre de 1965




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