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lunes, 8 de abril de 2019

EL MISTERIO DEL SANTO DESCENDIMIENTO, TAMBIEN CUMPLE SU SETENTA Y CINCO ANIVERSARIO


Primera fotografía realizada al paso de misterio una vez montado en la S.I.P.B. Catedral

La Hermandad de Esclavos del Descendimiento de la Cruz fue reorganizada en la Parroquia de Santa María del Prado, actual Catedral, el 19 de abril de 1688 haciendo entrega el cura, beneficiados y capellanes de dicha parroquia de la efigie que se veneraba en la Capilla del Dulce Nombre de Jesús, paso e insignias del Descendimiento a la Esclavitud.

A lo largo de la historia de la hermandad, esta ha tenido tres titulares. Con el que se reorganizó y estuvo como tal hasta el año 1900, solo sabemos que era portado por 8 hermanos a un hombro, y recibía culto en la referida capilla de la Parroquia de Santa María del Prado.

El escultor José Alsina Subirá talló el segundo misterio de la hermandad en 1901 a partir de la imagen de un Cristo en actitud de descendimiento, y completó el paso con el resto de las imágenes, importando la obra 14.000 pts. El misterio, aparte de la imagen del Señor, estaba compuesto de cinco figuras: José de Arimatea, Nicodemo, la Virgen María, San Juan y la Magdalena. Este “paso” desde su llegada a Ciudad Real, comenzó a recibir culto en la Ermita de los Remedios, lugar donde fue destruido en 1936 por republicanos de izquierdas del Frente Popular, al inicio de la Guerra Civil Española.

Terminada la Guerra, se hace cargo de la hermandad, José Pérez Fernández, encargando la Asociación de Cofradías un nuevo paso de misterio al conquense residente en Madrid, Luis Marco Pérez, que pago en su integridad. Una vez adquirido el paso, la hermandad se  reorganiza el 28 de marzo de 1944, celebrando una junta en el salón de actos del ayuntamiento, a la que asiste una representación del gremio de la construcción de la capital, integrada por arquitectos, aparejadores, contratistas y maestros de obra, en la que se dio cuenta de la llegada del nuevo paso adquirido, y se nombró junta directiva que quedo constituida por: Presidente de Honor a Fausto Fuertes Moreno, Hermano Mayor a Arturo Roldán Palomo –Arquitecto Provincial-, 2º Hermano Mayor a Francisco León Ruiz, Secretario a Ángel Rodríguez Niveiro, Vocal 1º a Manuel Cabañas Portillo, y Vocal 2º a José Pérez Fernández.

Escayola de la imagen de María Magdalena que Marco Pérez utilizó para realizar la figura del paso de misterio. Aparece arrodillada y con el rostro hacia lo alto. Viste túnica y muestra largos y ondulados cabellos. Le faltan los brazos desde los codos. Se conserva en el Museo de Cuenca y fue vaciada a bronce en 1996

La composición del misterio tallado por Marco Pérez, nos recuerda el desaparecido en 1936 y está compuesto por la imagen de Jesús en el momento de ser descendido de la cruz, con potencias en metal dorado; José de Arimatea y Nicodemo sobre dos escaleras bajando el cuerpo de Jesús y al pie de la cruz las imágenes de María, San Juan y la Magdalena. Entre los brazos de Jesús y la cruz, va una sabanilla en color blanco bordada. El misterio se completó en 1996 con el juego de la fuente y la jarra del lavatorio, poniéndole a la Magdalena un sudario entre las manos como esperando para amortajar a Cristo. Todas las imágenes son de madera policromada, siendo estas sus medidas: 170 cm. el Cristo; 160 cm. la Virgen; 160 cm. San Juan; 150 cm. Nicodemo y José de Arimatea; 110 cm., la Magdalena arrodillada.

No sabemos la fecha exacta de su llegada para celebrar la Semana Santa de 1944, aunque tuvo que ser en la semana de pasión, ya que el diario lanza el Lunes Santo 4 de abril del citado año, publicaba la siguiente nota: “TRES NUEVOS “PASOS” EN NUESTRA CAPITAL. Desde hace días se está procediendo con toda actividad a montar tres nuevos “pasos” para las procesiones de Semana Santa, recientemente adquiridos. Son estos: el Santo Descendimiento, en la Catedral; “Ece-Homo” o Pilatos, en Santiago y la Virgen del Mayor Dolor, en San Pedro. Todos ellos constituyen verdaderos aciertos de los imagineros respectivos y han de venir a contemplar la serie de “pasos” con que cuenta ya la Semana Santa ciudarrealeña”.

Como queda reflejado en la nota del diario “Lanza”, el paso fue montado en la Catedral, al no poderlo hacer en la Ermita de los Remedios al encontrarse profundamente dañada durante la Guerra Civil, procesionando por primera vez por nuestra ciudad el Viernes Santo 7 de abril de 1944.

Escayola de la imagen de la Virgen Dolorosa que Marco Pérez utilizó para realizar la figura del paso de misterio. Inspirada en la estatuaría del Siglo de Oro, la Virgen vestida con túnica y manto, dirige la mirada hacia lo alto, estirando el brazo derecho en dirección al suelo en tanto que el izquierdo aparece doblado con la mano en el pecho en actitud doliente. Muestra huellas de sacado de puntos. Se conserva en el Museo de Cuenca y fue vaciada a bronce en 1996

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