Buscar este blog

jueves, 20 de julio de 2023

IMÁGENES DEL CONSERVATORIO DE MÚSICA MARCOS REDONDO

 



En la calle Pantano del Vicario, se encuentra desde el año 2007, el Conservatorio de Música Marcos Redondo, una construcción de los arquitectos Ángel Fernández Alba y Soledad del Pino, autores también del Hospital General Universitario y del Parque Juan Pablo II.




Diego Peris, en un artículo que publicó el pasado año en el diario Lanza, dice lo siguiente de esta construcción: “Es el tercero de los proyectos de este equipo en Ciudad Real, resultado de un concurso de proyectos de arquitectura. El proyecto, situado en un solar de la antigua estación ferroviaria, tiene inicios difíciles con una necesidad de consolidación del terreno dadas las condiciones de los antiguos suelos ferroviarios. Los terrenos degradados por el antiguo uso deben renovarse y compactarse para adquirir la necesaria resistencia. Los volúmenes cerrados en uno de sus laterales que se abren en el otro cerrado por el muro externo apenas nos dejan entrever la realidad construida que se presenta como algo recogido, que debe entenderse de forma pausada y con un acercamiento tranquilo.

 



La cubierta de zinc se integra en esa sobriedad formal del edificio que tiene su poética exquisita en los detalles puntuales de formas complejas, de un volumen general que parte de la forma del propio solar en esa planta en V que se va ocupando con los volúmenes construidos. Los colores del hormigón y los grises del material de cubierta se iban adaptando a las soluciones de bordes, de canalones y bajantes de la cubierta que acaba revistiendo y haciéndose presente en huecos y encuentros del edificio. El zinc al igual que el hormigón, parecen hacer una referencia a ese tiempo de permanencia, de tranquilidad y sosiego presente en la construcción de un edificio público destinado a la docencia de la música.




El acceso por uno de sus frentes ligeramente hundido nos acerca a un espacio amplio, distribuidor y receptor de los usuarios del edificio. El espacio se llena de color por las ventanas de cristales coloreados situados en su parte superior. La rampa y los pasillos nos llevan hacia los diferentes espacios de aulas y servicios interiores del Conservatorio. Los pasillos quebrados y el juego de alturas con la luz y el color del interior nos remiten a tiempos diferentes.




La arquitectura de lo sutil, de lo sobrio de Ángel Fernández Alba y Soldad del Pino se va haciendo presente con el transcurso del tiempo y poco a poco el sentido de lo auténticamente cualificado se va convirtiendo en una realidad vivida y apropiada por la comunidad. La arquitectura de la luz y de los volúmenes requiere la presencia de la temporalidad como ingrediente esencial de su poética”.

 Las fotografías que publico en esta entrada, son del libro editado con motivo de la inauguración del conservatorio.

 















1 comentario:

  1. Emilio me siento orgulloso de haber ejecutado esta obra

    ResponderEliminar