La Cooperativa Provincial del campo, puso en funcionamiento en octubre de 1968, en los terrenos ocupados actualmente por el pabellón del “Quijote Arena” y la “Ciudad Deportiva Sur”, la llamada popularmente “La Quesera”.
El Boletín de
Información Municipal número 29, publicó un reportaje de esta industria
quesera, con varias imágenes, cuyo texto e imágenes reproduzco hoy en el blog:
“Ofrecemos a nuestros lectores varias fotografías de la sección de Industrias lácteas de la Cooperativa Provincial Ganadera, de la que puede sentirse orgullosa no sólo esta, sino Ciudad Real y al decir Ciudad Real nos referimos a toda la provincia, e incluso con más propiedad, toda la Mancha.
Es
una sagrada obligación el conservar en su pureza los productos típicos de cada
región o zona geográfica determinada y no cabe la menor duda de que tanto en la
provincia de Ciudad Real como en varias limítrofes, uno de esos productos de mayor
tipismo es el queso manchego, que al mismo tiempo que típico es un excelente alimento.
No
queremos con ello decir que antes no existiera el queso manchego bien
elaborado. No tenemos necesidad de recordar aquí a excelentes ganaderos que se
habían preocupado de esta cuestión, a la que habían dedicado y vienen dedicando
mucho entusiasmo y mucho dinero. Pero eran iniciativas aisladas, reducidas a
sus propios rebaños. Pero ahora la cosa es distinta. Se trata de fabricar el
queso manchego a escala industrial y además, siempre con las mismas características
organolépticas. Esta misión ha sido reservada, como no, a los mismos ganaderos,
propietarios de ovinos, pero agrupados en una gran Cooperativa, que es la que
adquiriéndoles la leche, fabrica el queso, en una gran fábrica en la que la
mano del hombre apenas tiene intervención, sino es para ayudar a ese proceso
industrial.
Una serie de camiones con rutas determinadas a través de la geografía de Ciudad Real, recorren diariamente la provincia recogiendo la leche a los ganaderos. Llegada esta a la Central Quesera, pasa a las máquinas encargadas de quitarle impurezas y pasteurizarla, siendo sometida a diferentes temperaturas. Posteriormente es llevada a los grandes recipientes de cuajado y seguidamente al de prensado, en sus moldes correspondientes. Hecho ya el queso y sumergido en salmuera durante determinado número de horas, pasa a las cámaras de fermentación, donde espera que pase el tiempo indicado para su venta al público. Como decimos, en todos esos procesos apenas interviene la mano del hombre, puesto todo está automatizado.
El
éxito alcanzado por el queso elaborado, bajo la m arca «Gran Maestre» es muy
difícil de igualar, hasta tal punto que ha sido preciso ampliar algunas de sus
instalaciones, a pesar de que hace apenas medio año que la industria empezó a
funcionar. Los ganaderos se han volcado materialmente vendiéndole la leche masivamente
y los cálculos previstos se han visto duplicados en tan corto espacio de
tiempo.
Las fotografías que publicamos dan una limitada idea de este gran complejo industrial que la Cooperativa Provincial Ganadera, con la ayuda financiera de la Caja Rural Provincial, ha montado muy cerca de Ciudad Real, en la carretera de Puertollano. El queso «Gran Maestre», sin duda el mejor queso manchego de España, tiene abiertos grandes mercados en infinidad de ciudades españolas, cuyo número se amplía diariamente. Cuarenta y siete representantes lo van introduciendo en los más apartados rincones y de todos se reciben las mejores noticias, por la gran acogida que tiene el citado producto allí donde es degustado.
Desde
el «Boletín Municipal» felicitamos a los mandos rectores de la Cooperativa
Provincial Ganadera por el éxito conseguido. Esta industria eminentemente
manchega, por su ubicación y por el producto que elabora, tenía necesariamente
que ser recogida en nuestras páginas, como reconocimiento y homenaje a todos
los que contribuyen a que el nombre de la Mancha tenga una resonancia nacional
y aún internacional.”
Dolor pena por qué terminase muchos recuerdos unos buenos otros no tanto pero fueron muchos y muchas horas las que. Viví ahí
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