El 6 de agosto de 1911, se inauguraba en
nuestra ciudad el primer local destinado a Mercado de Abastos, en el solar que
actualmente ocupa la subdelegación del gobierno de España. Hasta la fecha
referida, el mercado se realizaba desde la edad media al aire libre en la Plaza
Mayor. Pero este primer local destinado a mercado, pronto quedo pequeño con
motivo del aumento de la población, no reuniendo
las condiciones sanitarias adecuadas para la venta de productos alimenticios,
por lo que la corporación municipal de 1929, realizó un concurso de proyectos
para construir un nuevo mercado. Proyectos que durmieron en el baúl de los
recuerdos, hasta que la corporación municipal republicana de 1932, desempolvo
estos proyectos, declarando desierto el concurso.
Mientras tanto, la corporación municipal
adquiere para edificar el nuevo mercado, el llamado “Huerto del Pangino”,
propiedad del Marqués de Casa Treviño, situado en la manzana de las calles: Morería,
Borja, Reyes y Postas, por un importe de 100.000 pesetas, encargando al
arquitecto municipal D. José Arias Rodríguez-Barba, la elaboración de un proyecto
de nuevo mercado, que realizó en 1934. Pero este proyecto no se llego a
ejecutar, y años más tarde con la llegada de la Guerra Civil Española, se vería
paralizado todo este proyecto.
Terminada la Guerra Civil, el
ayuntamiento nacionalsindicalista retoma el proyecto del nuevo mercado, con los
planos elaborados por D. José Arias, siendo subastadas las obras en octubre de
1940, al contratista Bernardino Elizarán en 1.659.653’40 pesetas. Los primeros
trabajos comenzaron poco después, con el derribo de las casas colindantes al
huerto, y la cimentación. Pero al poco tiempo quedaron paralizadas, y el contratista
renunció a continuarlas, rescindiendo por tanto la subasta el Ayuntamiento,
cuando iban invertidas 177.288’30 pesetas en las obras realizadas.
Entonces el ayuntamiento elaboró un
nuevo proyecto, sacándolo por dos veces a subasta, quedando desierto, por lo
que el ayuntamiento acordó realizar las obras por administración, haciéndose cargo
de las mismas los maestros, don Cleto Vera, don Francisco León y don José Selas,
reanudándose las mismas en enero de 1944.
Iniciadas las obras, estas se prolongarían
durante varios años, por dos motivos principalmente: uno por la disponibilidad económica del
ayuntamiento, y el otro por no poder conseguir de forma inmediata los materiales
para la construcción del nuevo mercado, sobre todo el hierro y el cemento,
escasos en la postguerra española. Acabada su edificación, se tuvo que equipar
el nuevo mercado, entre otras cosas con cámaras frigoríficas, lo que prolongaría
aún más su fecha de apertura.
Una vez acabado y equipado el nuevo
mercado, este fue bendecido a las cinco de la tarde del 19 de enero de 1949,
por el entonces Vicario General de la Diócesis, D. Pedro Fernández de Sevilla,
acompañado del alcalde de Ciudad Real, D. José Navas Aguirre, y de
diferentes autoridades locales y provinciales, comenzando a funcionar ese mismo
día.
El nuevo mercado, constó en un principio
de un gran patio dedicado a mercaderes de puestos eventuales y entrada de
carros. De las tres plantas que consta el edificio, en la baja se instalaron 28
puestos de pescado y cuatro cámaras frigoríficas. El primer piso se dedicó a
puestos de carnicería, frutas, huevos, verduras, etc.., y en el segundo piso se montaron oficinas municipales y el laboratorio de veterinario. También se
instalaron dos bares, para servicio de los vendedores y los ciudadanos, y
tiempo después un supermercado.
Como dato curioso decir, que pocos meses
después de su inauguración, el 7 de julio de 1949, Dª. Carmen Polo, esposa del
jefe del estado, D. Francisco Franco, visitó el mercado, al encontrase de
visita en nuestra ciudad, al ser invitada por los marqueses de Huetor de Santillán,
que tenían su residencia en la antigua casa natal de Hernán Pérez del Pulgar.
En el año 1965, la corporación municipal
acuerda cerrar el patio al aire libre del mercado por la calle Borja, que desde
su inauguración, se encontraba solo cerrado por una valla. En 1978 comenzó a
ejecutarse una remodelación en el Mercado Municipal, quitándose los puestos
centrales de la primera planta. Las obras de reforma concluyeron en 1983, dejando el recinto con unos 150 puestos de
venta.
La última reforma realizada en el
edificio, comenzó en 1998 y consistió en agrupar en el planta baja, los
diferentes puestos de mercado, y rehabilitar el resto del edificio, para
dependencias de las diferentes concejalías municipales.
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