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sábado, 1 de diciembre de 2012

“HITOS BÁSICOS EN LA HISTORIA DE LA IMAGEN DE NUESTRA SEÑORA DEL PRADO EN CIUDAD REAL, DE VELILLA DE JILOCA AL POZUELO DE DON GIL”



El claustro del Antiguo Convento de la Merced, acogió el pasado jueves  29 de noviembre, la segunda conferencia organizada dentro de los actos con motivo del III Centenario del Camarín de la Virgen del Prado. Esta segunda conferencia estuvo a cargo del Canónigo de la Catedral, D. Jesús Abad Ramos, covicepresidente de la comisión mixta Iglesia-Junta de Comunidades para la restauración del patrimonio eclesiástico.


Su intervención la centro en el cuadro que se conservaba en el camarín de la Virgen del Prado, de principios del siglo XVI, que en el año 2005 fue restaurado por las Monjas Mínimas de Daimiel  y que actualmente se ubica encima de la puerta de acceso al camarín de la Virgen del Prado.

Para el ponente este cuadro explica en sus tres escenas, lo principal de la aparición de la Virgen del Prado en nuestra ciudad. El sacerdote recordó que la talla original fue descubierta en Velilla de Jiloca (Aragón) en el año 1013 por Ramón Froilaz, caballero vasallo de Sancho el Mayor de Navarra. En la corte de Pamplona pasó a ser la Virgen de los Torneos, pues presidía este tipo de actos. Años después llegó por herencia a Alfonso VI, que la llevaba en sus campañas militares como Virgen de las Batallas, tras una  derrota a la que no había llevado la imagen requirió a su capellán, Marcelo Colino, que se la hiciera llegar.


Cuando Colino mostró la imagen a los habitantes de Pozuelo de Don Gil, estos pidieron que se quedara en la aldea, lo que rechazó el religioso. En la siguiente acampada en Caracuel, desapareció la talla y cuando se la buscó, apareció en el prado cercano al Pozuelo.

También comento la escena central del cuadro que representa la visita de la Reina Doña Berenguela en el año 1242, su hijo Fernando III el Santo y su mujer.

D. Jesús Abad, termino su intervención hablando sobre la restauración del retablo de la Catedral y de la reja del siglo XVI que da acceso a la escalera de subida al camarín.



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