Ciudad Real siempre ha celebrado el 15 de agosto, la festividad de la Asunción de la Virgen María, que es cuando la Iglesia Católica conmemora la elevación en cuerpo y alma de la Virgen María desde la vida terrena hasta el cielo. Esta festividad se realizaba en la Parroquia de Santa María del Prado, actual Catedral, en torno a la imagen de Santa María del Prado, surgiendo la Feria y Fiestas de nuestra ciudad alrededor de la devoción a la Virgen.
Pero no fue hasta 1946 cuando el ayuntamiento acuerda en sesión extraordinaria de su pleno el Voto Asuncionista. El diario Lanza, en su número del martes 24 de diciembre de 1946, informa sobre ello:
“En sesión extraordinaria, el pleno del Excmo. Ayuntamiento aprobó por aclamación la siguiente propuesta, interpretando de este modo los sentimientos religiosos del pueblo de Ciudad Real:
“El alcalde y los tenientes de alcalde, que suscriben, tienen el alto honor de elevar al Excmo. Ayuntamiento, la siguiente propuesta:
Ciudad Real, que en todos los periodos de su
historia ha acudido a la mediación de Nuestra Señora Santa María del Prado, y
con tanto consuelo la ha experimentado en momentos de peligro, se manifiesta en
estos días con especiales pruebas de devoción y amor a tal Excelsa Madre en el
misterio adorable de su Asunción a los cielos, respondiendo de este modo
solicita y reverente a las exhortaciones del Santo Padre, felizmente secundadas
por nuestro Rvdmo. Prelado.
Parece pues oportuno y hasta cierto punto obligado, que la Corporación Municipal a la que incumbe con arreglo a su ley constitutiva el fomento de los intereses morales de la comunidad local, entre los que debidamente hay que hacer preponderar los de carácter religioso base y fundamento de la existencia de la Patria, esté dispuesta a recoger de forma pública y solemne esta corriente de espiritualidad mariana, que dio origen a nuestra ciudad, por el hecho singular de la aparición milagrosa de la imagen de Nuestra Señora del Prado, conforme lo atestigua la venerada creencia contenida en el depósito de una secular tradición.
La significación propia de este tributo del pueblo de Ciudad Real a su Excelsa Reina y Señora, debe plasmarla el Excmo. Ayuntamiento de la misma forma como lo hiciera en tiempos pasados, cuando acordó defender el dogma de la Inmaculada Concepción, tan íntimamente relacionado con la verdad Asuncionista.
En mérito a lo expuesto, concretamos esta Propuesta, a la adopción de los siguientes acuerdos:
1º.- Que el Excmo. Ayuntamiento de Ciudad Real, fiel a su origen y tradición Mariana, acuerde y haga constar en Acta, el Voto de defender, ahora y siempre la Asunción corporal de la Virgen Santísima a los Cielos.
2º.- Que este Voto se conmemore todos los años el día 15 de Agosto, festividad de la Asunción, con asistencia corporativa del Excmo. Ayuntamiento a los cultos que se celebren en la Santa Iglesia Prioral, en honor a la Santísima Virgen del Prado.
3º.- Que la proclamación solemne y pública del Voto Asuncionista se realice de acuerdo con la jerarquía eclesiástica, para lo cual se autoriza al señor Alcalde-Presidente de la Corporación Municipal; y
4º.- Un ejemplar del Acta, se traslade al Ilmo. y Rvdmo. Sr. Obispo Prior de las Ordenes Militares, con el ruego que haga llegar a S. S. Pío XII a súplica filial, que si su altísima sabiduría estima llegado el momento oportuno, se digne definir como dogma de fe esta santa y venerada doctrina de la admirable Asunción de María en cuerpo y alma a los cielos. Ciudad Real 10 de diciembre de 1946. José Navas, Dionisio Guijarro, Adolfo Lucendo, Luis Oraá”.
Además de los firmantes de esta proposición
asistieron a la sesión pública, los concejales señores Barreda, Sánchez de
León, Escalza, Monreal, Vélez, del Campo, Navarro y Heredia; Interventor de
fondos, señor Sendra y Secretario, señor Deus Vilar.”
El Ayuntamiento proclamó el Voto de la Asunción el 15 de agosto de 1947, durante la procesión de la Virgen del Prado. El diario Lanza, en su número del 16 de agosto de 1947, nos da cuenta de cómo el Ayuntamiento realizó este acto:
“Al llegar la procesión a la Plaza del Generalísimo, el público invadió por completo su amplio recinto, ofreciendo un magnífico aspecto. La venerada imagen fue situada junto al Ayuntamiento y las autoridades y representaciones eclesiásticas y oficiales se situaron en la terraza.
En este momento el alcalde de la capital don José María Navas Aguirre puesto de rodillas, leyó ante la Virgen del Prado con voz clara y fuerte la fórmula del voto asuncionista, que es como sigue:
SERENISIMA EMPERATRIZ DE CIELOS Y TIERRA, MADRE DE DIOS Y MADRE DE LOS HOMBRES, VIRGEN SANTÍSIMA DEL PRADO
Ciudad Real, que en todos los periodos de su
historia ha acudido a tu Mediación de Madre y con tanto consuelo la ha
experimentado en momentos de peligro, se manifiesta en este día, en exaltación
jubilosa de amor para honrar el misterio adorable de vuestra Asunción a los
cielos.
Haciéndonos eco del sentir mariano de nuestra
ciudad, que un día naciera al calor vivificante de tu mirada, y para responder
a los deseos del Santo Padre secundados por nuestro reverendísimo Prelado, el
excelentísimo Ayuntamiento acordó en la sesión extraordinaria del día 9 de
Diciembre de 1946, hacer el voto de defender ahora y siempre, el misterio de
vuestra Asunción Corporal a los cielos. Al tomar esta decisión, oh Señora
Virgen Santa María del Prado, no hicimos sino seguir la trayectoria que nos trazaron
nuestros mayores; también nuestro Municipio en tiempos pasados juró defender el
dogma de vuestra Inmaculada Concepción.
Queremos en este día, de tan gloriosa tradición mariana, en nombre de nuestra ciudad, confesar y proclamar la verdad de vuestra Asunción gloriosa en cuerpo y alma a los cielos, firmemente persuadidos que Dios no permitió que la corrupción del sepulcro manchase vuestra carne; y que asociada a Cristo Redentor en la lucha contra la serpiente infernal triunfasteis del pecado por vuestra Inmaculada Concepción, de la concupiscencia por vuestra divina maternidad y de la muerte, por vuestra anticipada resurrección y Asunción gloriosa a los cielos. Asimismo, confesamos y proclamamos que en virtud de vuestra cooperación a la obra del Calvario, habéis sido constituida Medianera Universal de todas las gracias.
En la presencia de Dios Omnipotente y postrado ante vuestras plantas, oh Virgen Santísima, Santa María del Prado y poniendo por testigos de este juramento a santo Tomás de Villanueva y a los Beatos Juan de Ávila y Juan Bautista de la Concepción, flores de esta tierra manchega, yo José María Navas Aguirre, alcalde-presidente de la Corporación Municipal y en nombre de la ciudad, prometemos solemnemente defender ahora y siempre con la ayuda de Dios, la constante universal y secular creencia de la Iglesia Católica, en vuestra Asunción gloriosa en cuerpo y alma a los cielos y la Mediación Universal; así lo prometemos; así lo juramos; así Dios nos ayude, y sus Santos Evangelios.
Y ahora dejad que elevemos hasta vuestro trono nuestra suplica: en la proclamación dogmática de vuestra Asunción corporal a los cielos vemos el iris de paz que brilla en el horizonte nubiloso de la postguerra. Oh Virgen Santa María del Prado, dad la paz a las naciones; y en estas horas de agitación social que viven los pueblos, continuad vuestra obra de valimiento para con España; dirigid a nuestro Caudillo, abanderado de la causa de la cristiandad, como gustéis en caminos de victoria a Sancho Mayor, a su hijo Fernando I de Castilla y Alfonso VI. Vuelve, oh señora, hacia nosotros esos tus ojos misericordiosos y que Ciudad Real siga siendo la tierra de tu predilección, nosotros, fieles a nuestra tradición mariana, tenemos por nuestra más grande timbre de gloria el que te hayas dignado quedarte en esta nuestra tierra manchega para ser nuestra Reina y Nuestra Señora del Prado. Amén”.
Al término de la proclamación del Voto, el
entonces Obispo-Prior, D. Emeterio Echeverría y Barrena, contestó al alcalde,
terminando el acto con el canto del himno de la Virgen por la capilla de la
Catedral.
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