El
actual presbiterio corresponde a las obras de restauración de la Catedral de
1967
El presbiterio de nuestra Catedral tal y
como actualmente se encuentra, corresponde a las obras de restauración que
sufrió el templo y que se iniciaron en el año 1961 y concluyeron seis años después,
es decir en 1967.
En las citadas obras se doto al templo
de un amplio el presbiterio colocando en el centro el altar. Rodeando a este se
colocó una artística silla coral
realizada por los hermanos Cruz Solís y pagada por los miembros del
entonces Cabildo Prioral y Obispo-Prior, cuyos relieves representan a distintos
santos, vinculados a la Diócesis o devoción particular de los capitulares que
la costearon.
Altorrelieve
de San Juan Bautista en la cátedra del obispo en la sillería coral
Consta de la cátedra presidencial del Obispo-Prior
de las Ordenes Militares, más alta que las demás con alto respaldo cobijado por
el espacio que para el antiguo altar y su sagrario dejaba el retablo. La parte
superior del respaldo, tiene un altorrelieve de San Juan Bautista, con
indumentaria de piel de cordero y amplio manto. Su cabeza es bella y poderosa,
de enérgicos rasgos y casi exenta; en la parte inferior, las veneras de las
cuatro Órdenes Militares de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa; y
coronando la misma el escudo de armas del Obispo-Prior, D. Juan Hervás y Benet,
obispo que aportó el valor del trono episcopal.
A los dos lados de la presidencia,
siguiendo el canon de las clásicas sillerías corales, una alta y otra baja,
ambas con doce sillas a cada lado. Más para adaptarse a la forma del retablo,
en la alta, las seis más internas de cada lado rebajan su respaldo, dentro del
cual en bustos de alto relieve en las de respaldo bajo y cuerpo entero en las
de respaldo alto, acogen las siguientes imágenes:
Dirección evangelio: San José (1), San Aurelio
de Córdoba (2), San Onofre (3), San Juan de Ávila (4), San Ildefonso (5), San
Antonio de Padua (6), San Audaz (7), Santa Julita (8), Santa Teresa de Jesús (9),
San Juan de la Cruz (10), San Juan Bautista de la Concepción (11) y Beato
Fernando de Ayala (12).
Dirección epístola: San Raimundo de
Fitero (1), San Pedro Apóstol (2), San Pascual Bailón (3), San Francisco Javier
(4), Santo Ángel de la Guarda (5), Santo Tomás de Villanueva (6), San Pío X
(7), San Francisco de Paula (8), Santo Tomás de Aquino (9), San Fernando (10),
San Antonio María Claret (11) y San Vicente Ferrer (12).
La sillería se completa con un friso clásico
en las sillas corales de respaldo alto, interrumpido por triglifos sencillos y
con remate de pináculos geométricos, terminados en bolas, que armonizan
gratamente con el conjunto del retablo renacentista.
La sillería
coral es de los hermanos Cruz Solís de los años sesenta del pasado siglo XX
Como he dicho anteriormente, en el centro del presbiterio se encuentra el altar de mármol, con la frase. “Jesucristo, Ayer, Hoy y Siempre” en su frontal. Debajo del altar y desde el año 2007, nos encontramos los restos del que fuera el séptimo Obispo-Prior D. Narciso de Estenaga Echevarría y su fiel secretario D. Julio Melgar Salgado martirizados en 1936 y beatificados el 28 de octubre de 2007, en Roma, con otros 498 mártires del siglo XX en España, que dieron su vida por la fe en Nuestro Señor Jesucristo durante la persecución religiosa en el verano de 1936.
En la pared del presbiterio podemos
admirar dos tablas renacentistas del siglo XVI del antiguo retablo de San
Miguel y atribuidas por algunos a Berruguete, y que representan una al Apóstol
San Juan y la otra al Arcángel San Miguel.
Junto a la puerta de acceso al camarín
de la Virgen del Prado podemos ver una tablilla o cartela con la frase “Hic Est
Chorus”, que es un aviso que señalaba el coro de canónigos que iniciaba los
salmos y oraciones y que debía de ser contestado por el coro contrario.
Cierra el presbiterio los dos ambones
laterales que se colocaron ambos lados del altar, que fueron realizados por los
hermanos Cruz Solís en los años sesenta del pasado siglo, y que son dos águilas parejas.
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