El 21 de julio de 1950, abrió sus puertas al
culto la capilla del entonces convento de las Adoratrices de Ciudad Real -Esclavas del Santísimo Sacramento y de la Caridad-, que en realidad era un reformatorio
de mujeres propiedad del estado y atendido por las religiosas Adoratrices. En su
capilla se estableció la Parroquia de Santo Tomás de Villanueva en 1960 y allí estuvo
hasta 1973, año que se inauguró el actual templo parroquial.
Su capilla, actual salón de actos del Complejo
Residencial para Personas con Discapacidad Psíquica "Guadiana" Módulo
I, en la Ronda del Parque, guarda en lo que fuera su altar mayor unos grandes
frescos del Corazón de Jesús y a sus pies la fundadora de las Adoratrices Santa
Micaela del Santísimo Sacramento, de San José y la Inmaculada Concepción firmados por J.
Garrido en 1951.
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