El martes ultimo tuvo efecto en esta capital la procesión anual en honor al Santo Obispo de Sebaste, venerado en la parroquial de San Pedro.
El acto resultó simpático en extremo, pues asistieron más de mil niños de ambos sexos, los cuales daban muestras de júbilo y abnegación, pues algunos de muy corta edad producían el encanto del público, por verificar la carrera sin el menor indicio de cansancio.
Los mantenedores de la infantil congregación merecen un aplauso, pues este año han asistido cientos de niños más constituye la ceremonia un hermoso aspecto de sol, niños y virtuosas madres y en general innumerable público que convirtió en fiesta el 3 de Febrero con este motivo.
Estos futuros padres, protagonistas de la
fiesta, recordarán en sus años el respeto y el amor a Dios, haciendo felices y
honrados sus lugares.
Revista “Vida Manchega” Nº 96.
Ciudad Real 5 de febrero de 1914
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