En el capitulo anterior hacía referencia al rey Juan II,- padre de Fernando de Aragón, el rey Católico que otorga el título de "ciudad nuestra capital en 1420. El mismo su esposa, Doña Blanca de Navarra, visitaron la ciudad, con tan mala suerte que coincidió con un gran terremoto que hubo en el lugar, del cual escaparon con gran sobresalto. El más alto dignatario del momento persona de confianza del rey, D. Álvaro de Luna, fue durante tiempo escribano almojarife de Ciudad Real oficial, que en nombre del rey cuidaba de recaudar las rentas derechos del rey los tenía en su poder como tesorero.
La Reina Católica, Isabel de Castilla, también visitó la ciudad en 1484 es casi seguro que lo hiciese en más de una ocasión ya que estaba empeñada en la conquista de Granada, por lo cual era paso obligado lugar de descanso de la reina en tan largos repetidos viajes.
Sintió la reina Isabel por Ciudad Real una
especial predilección, quizá en agradecimiento por las luchas continuas que
sostuvimos con los Maestres de la Orden Calatrava el vecino pueblo de Miguelturra,
perteneciente éste la Orden. Hablaremos en otro capítulo de la Batalla de
"Malas Tardes". Prueba de esta predilección es la creación de
importantes organismos en la ciudad el otorgamiento de privilegios.
Establecieron los reyes Católicos en Ciudad Real, el Tribunal de la
Inquisición, que funcionó de 1483 a 1485 en que fue trasladado Toledo. También
crearon la Real Chancillería el 30 de Octubre de 1494. En 1505, poco después de
fallecer la reina, fue trasladada Granada. Obtiene también de la Reina católica
una casa para edificar el Ayuntamiento casa Consistorial. Esta estaba situada
en la Plaza Mayor, haciendo esquina con la calle Correhería, hoy recibe el
nombre de María Cristina.
Plaza Mayor
Era la Plaza Mayor de Ciudad Real, como otras muchas de la época, en las grandes ciudades, el centro cívico administrativo, el lugar de mercado ferias, de fiestas de toros incluso de ejecuciones públicas (Autos de Fe) de la Inquisición.
A ella convergían directamente las calles que comunicaban la ciudad con el exterior. Su forma de un amplio rectángulo porticado sirvió de escenario para grandes celebraciones, donde los propietarios de las viviendas que daban la plaza, alquilaban sus balcones para presenciar fiestas de toros otras actividades que en ella se celebraban.
El antiguo Ayuntamiento, que en l484 se comienza edificar sobre una casa confiscada un judío Alvar Díaz- no concluye su obra,- por falta de presupuesto, hasta años más tarde. Se tiene conocimiento documental de que el Emperador Carlos I, concede 120.000 maravedíes para la terminación de la Casa Consistorial de Ciudad Real.
En el siglo XIV ya existía un Ayuntamiento
que padeció bajo las llamas del fuego, su destrucción. Eran frecuentes estos
incendios pues el elemento predominante en la construcción era la madera tanto
la iluminación base de velas, candiles lámparas de aceite, como la calefacción
con fuego en las chimeneas braseros, ocasionaba frecuentes accidentes en los
que se propagaba con facilidad. través de este medio altamente combustible.
Los portales existentes en esta primera Plaza eran de madera. Con posterioridad, estas columnas que sostenían las viviendas formaban un peristilo color ocre, fueron sustituidas por otras de piedra.
Como ha ocurrido con otras tantas edificaciones, esta Plaza Mayor ha sufrido digo sufrido, con su doble significación, como transformación como dolor, sufrimiento diferentes transformaciones "modernizaciones" con las cuales ha ido perdiendo su sabor medieval. Los Pilares de piedra, que debían dar ese ambiente medieval Plaza, tan antigua bella, también fueron sustituidos por otros más modernos de hierro. Estos, le dieron no solo un carácter de modernidad, también esbeltez. Pero...el tiempo el mal gusto, acabaron también con ellos, recubriéndolos de un feo revestimiento de hormigón blanco, quizá para hacer juego con la variopinta edificación de esta, en la actualidad.
En el 1508 el desbordamiento del río Guadiana inundó la Plaza Mayor, la Plaza del Pilar otras zonas de baja cota de Ciudad Real. En 1755, un nuevo terremoto causó graves daños las pobres edificaciones también su Ayuntamiento, que años más tarde después de haber padecido otro incendio, fue declarado en ruinas en el 1864.
En el 1868 se pondría la primera piedra una nueva edificación, ahora el nuevo edifico ocupará el lado Sur de la Plaza. Lugar que ocupa su actual ubicación. Al nuevo Ayuntamiento se le añadió algunos años más tarde, una torre, en la cual se instaló un vistoso reloj. En 1919, de nuevo la Plaza se ve afectada por un nuevo plan de renovación, nuevos balcones medallones aparecen como elemento decorativo.
En, el 1969, un siglo después de su
edificación, será derribado un nuevo edificio ocupará su lugar. Este edificio
cuyo proyecto lo realizó Fernando Higueras. Fue motivo de gran polémica aún
sigue suscitando división de opiniones con respecto la armonía con su entorno.
Amalio Astilleros Ramos, diario
“Lanza”, sábado 27 de noviembre de 2004
Que varbaridad hicieron.
ResponderEliminarNo tiene perdón de Dios lo que hicieron, qué barbaridad y qué pena
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