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miércoles, 11 de junio de 2014

VILLADIEGO



La Finca Villadiego se halla a las lomas del Castillo de Alarcos en Ciudad Real y parte de ella está enclavada en el conjunto histórico del mismo, teniendo las primeras referencias a este lugar en el siglo XII, en plena reconquista peninsular.

Vista del caserío de Villadiego

Más concretamente en la Batalla de Alarcos celebrada el 19 de julio de 1.195 D.C. en la cual los cristianos fueron expulsados de dicho castillo tras una estratagema urdida por los moros, los cuales se escondieron aprovechando la noche tras el único cerro cercano al castillo llamado “cerro de los pescadores” y al amanecer una pequeña avanzadilla se situó ante el poblado que rodeaba al castillo. Mientras, los incautos cristianos al ver el pequeño número de asaltantes decidieron abandonar las murallas para combatirlos en las llanuras, pero cuál fue su sorpresa, que al enfrentarse a ellos, la gran mayoría de los invasores rodearon el castillo por los montes donde se sitúa la fortaleza “el despeñadero” y cogieron por sorpresa a los soldados cristianos, los cuales fueron en gran parte mermados. Alfonso VIII, rey de Castilla, fue derrotado por el ejército Almohade de Yusuf II. Tal fue el desastre cristiano que incluso el rey castellano se encontró en peligro y tuvo que abandonar el castillo de Alarcos (Ciudad Real) a golpe de caballo con unos poco leales. Y  esta huida se realizó por el camino de Villadiego hacia el castillo de Manzanares. En el castillo de Alarcos quedó Don Diego López de Haro al mando del resto del ejército Cristiano.

Puerta principal de entrada al caserío 

Desde entonces se usa la expresión “tomar  las de Villadiego” cuando se huye a toda prisa de un lugar, sea o no para salvar la vida.

Todo el caserío está pintado con cal y azulete

Otra de las características históricas de la finca es el paso de la ruta de D. Quijote de la Mancha por estas tierras y aprovechando el margen del río que cito con anterioridad, por lo que se piensa que el famoso Hidalgo anduvo por estos lugares e incluso pudo citarse la célebre frase como alusión, en el Capítulo XXI cuando se dice: “dígame vuestra merced qué haremos deste caballo rucio rodado que parece asno pardo, que dejó aquí desamparado aquel martino que vuestra merced derribó, que según él puso los pies en polvorosa y cogió las de Villadiego, no lleva pergenio de volver por él jamás”.

Actualmente el caserío se dedica a la venta de Queso Villadiego

En Villadiego encontramos una construcción que es un ejemplo típico de caserío manchego y como tal, en él destaca su  patio empedrado manchego donde llama la atención el característico "azulete" manchego, color utilizado tradicionalmente para el exterior de las casas en esta zona de España y que es empleado en todo el caserío.

Fachada lateral del caserío, donde se encuentra una inscripción labrada en piedra de 1886

En su exterior destaca la puerta con pilastras de piedra de sillería y ambos lados de la misma nos encontrados dos poyos pintados en azulete, destacando también la rejería  y la cerámica con la imagen de la Virgen. En una fachada lateral, encontramos una inscripción en la cual se lee: “Se izo esta obra, Año De 1886, Propiedad de D. Accedo Rico”.

La  piedra tiene la siguiente inscripción: “Se izo esta obra, Año De 1886, Propiedad de D. Accedo Rico”

Actualmente es una quesería que elabora “Queso Villadiego”, no conociéndose con exactitud el tiempo que lleva en funcionamiento ya que en la finca desde sus comienzos se venía elaborando queso manchego de forma tradicional. En un principio era el mismo pastor que cuidaba de las ovejas el que se encargaba tanto de ordeñarlas como de hacer el queso manchego con los utensilios característicos de la época, los cuales aún se conservan.

La  puerta principal tiene pilastras de piedra de sillería

Recientemente se ha realizado un pequeño estudio histórico de la finca y es se han encontrado documentos que datan de 1.840, por lo que a partir de esta fecha podemos afirmar que ya se elaboraba queso.

Ambos lados de la puerta hay poyos

También destaca en el caserío, la moderna capilla en los años sesenta del pasado siglo XX, construida en un lateral del caserío y que se encuentra pintada con cal y el ya nombrado color azulete.

Una retablo cerámico con la imagen de la Virgen se encuentra a un lado de la entrada

En su exterior destaca la rejería de las ventanas

En el zaguán de entrada encontramos la entrada a la Quesería 

En su interior destaca un amplio patio empedrado

El patio es característico típico manchego

Otra vista del interior del patio 

Capilla del caserío 

Vista del exterior del caserío, con las cuadras del ganado

Cuadras del caserío, también pintadas con el color típico manchego


3 comentarios:

  1. Qué gran entrada Don Emilio, siempre al pie del cañón para hacernos saber un poquito más sobre nuestra historia.

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  2. El artículo tiene un par de errores que querría comentar:
    PRIMERO: los cristianos no fueron unos incautos al salir a defender la ciudad fuera del recinto amurallado ya que tal recinto no estaba terminado. Las fuentes escritas hablan de que las murallas no estaban terminadas cuando llegó el ejercito almohade de Abu Yucub "Al Mansur"y después las fuentes arqueológicas lo corroboran con un hallazgo único en Europa: una de las fosas de cimentación de la muralla que aún se encontraba abierta porque se estaba levantando la construcción se hallaron restos oseos de soldados cristianos tirados sin ninguna colocación (ya que fueron los perdedores e iban a fosas comunes mientras que los muertos del bando ganador siempre se entierran con honores) y mezclados con restos de caballos percherones cristianos, caballos de raza árabe, dromedarios, los pertrechos de los soldados y restos de ambos campamentos. Bajo estos restos se encontraron restos de materiales contructivos listos para colocar en la muralla. Además no es el único sitio donde se puede ver la acumulación de material a pie de la fosa de cimentación: si subimos a Alarcos por Poblete por el carreterín que pasa por encima del campo de batalla, se puede apreciar en la parte baja de la ladera una serie de bandas de piedra que no son otra cosa que el material que Alfonso VIII mandó acumular para levantar la muralla.
    SEGUNDO: Asegurar que la famosa frase de "tomar las de Villa Diego"viene de la finca del mismo nombre, es mucho asegurar.

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  3. Hay que tener en cuenta que,por un lado, dicho topónimo es muy común en la península y no tiene por qué referirse a este Villa Diego y, por otro, que tendría que darse el caso que a finales del S. XII la finca se extendiera por la ladera norte del cerro de Alarcos ya que las fuentes escritas especifican que Alfonso VIII fue evacuado por la parte norte de la ciudad.

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