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martes, 11 de junio de 2013

LA FUENTE DE LA PLAZA DE LA PROVINCIA


La Fuente de la Plaza de la Provincia en los años sesenta del pasado siglo XX, tras su inauguración en 1963

Estamos asistiendo durante estos últimos días, a una polémica en los medios de comunicación sobre  la desaparición de dos esculturas de la fuente de la Plaza de la Provincia, del escultor ciudadrealeño Joaquín García Donaire. Dos esculturas realizas en cemento que por dentro llevaban una estructura de hierro, y que fueron retiradas de la fuente para proceder a la restauración de una de ellas que estaba deteriorada por la humedad. A continuación voy a dar unas pinceladas de cómo  surgió esta fuente y que elementos artísticos hay en ella.

El ayuntamiento de Ciudad Real en la sesión extraordinaria celebrada el 2 de diciembre de 1950, adoptó por unanimidad el proyecto facultativo para la apertura de una nueva calle en nuestra ciudad, que partiendo de la Plaza del Pilar debería concluir en la Ronda o Paseo de Cisneros (actual Ronda de Ciruela). Se pretendía reformar el interior de una zona de esta capital comprendida entre las calles de Alfonso X el Sabio, Avenida de los Mártires, (Alarcos) y Paseo de Cisneros, al encontrarse allí grandes extensiones de terreno sin edificar y rodeado por calles. El proyecto consistía en trazar una calle que, partiendo de la Plaza del Pilar, atravesara los solares donde se celebraba el cine de verano, la calle del Tinte, una zona de huertos y descubiertos hasta por fin dar con la Ronda de Cisneros. En el centro de este amplio solar se potenciaría una plaza a  la altura de la calle Tinte. La nueva calle que se proyectaba tendría una anchura de 15 metros en toda su longitud, y la glorieta o plaza un diámetro de 50 metros.

En esta postal se puede ver la ubicación de las dos esculturas de las mujeres desnudas, a ambos lados de la fuente

Una vez concluida la expropiación de los solares, construida la nueva calle y plaza, el ayuntamiento capitalino quiso adornar la plaza con la construcción de una fuente obra del arquitecto municipal Luis Fernando Bendito Serrano, siendo ejecutada y controlada por el aparejador Bonifacio Villaverde y decorada por el escultor ciudadrealeño Joaquín García Donaire.

La fuente se corresponde con una composición vertical geométrica y simplista realizada en hormigón visto con acabados y texturas diferentes. En ella se plasman cuatro relieves, reflejo del exquisito trabajo que Joaquín García Donaire llevo a cabo en la ciudad en 1962, donde se muestran las cuatro estaciones del año, con una fuerte connotación simbólica.

El otoño con la vendimia: proceso inicial de la elaboración del vino, en el que se recoge la uva; el invierno con el pastoreo, es decir, consumo directo del pasto por el ganado; la primavera con la maternidad, esta estación del año corresponde con el nacimiento del fruto, por eso su escultor quiso mostrarnos una comparación con lo que supone la maternidad ó nacimiento y por último, el verano con la siega: momento de recogida de los cereales.

La iluminación de la fuente corrió a cargo de la empresa “Vilumi”, que tenía su sede en la calle Lanza de nuestra ciudad

La fuente contó con dos desnudos femeninos colocados a ambos lados, que no eran del agrado del Obispo-Prior de entonces, D. Juan Hervas y Benet, y debido a la moralidad de la época, fueron colocados de espalda al público en lugar de su posición frontal como estaba inicialmente previsto. Las esculturas simbolizaban Castilla-La Nueva y la Mancha.

La fuente fue inaugurada a las 11 de  la noche del 7 de julio de 1963 por el Alcalde de Ciudad Real, Victorino Rodríguez Velasco, acompañado del Gobernador Civil de la Provincia y ante una gran cantidad de ciudadrealeños que se habían congregado en la plaza ante la expectación que había levantado la inauguración.

Una de las esculturas desaparecidas de la fuente. Las esculturas fueron colocados de espalda al público en lugar de su posición frontal como estaba inicialmente previsto, debido a la moralidad de la época

El acto comenzó cuando el alcalde descubrió la placa que daba nombre a la Plaza de la Provincia y que llevaba el escudo provincial. A continuación el alcalde pronunció las siguientes palabras:

Excmo. Sr. Ilmos. Sres, compañeros de Corporación, amigos todos:

Sólo unas palabras, para justificar el acto que estamos celebrando. Vamos a conmemorar el 18 de julio, fecha histórica, para todos los españoles. Estamos inaugurando unas obras, que, con las ya realizadas y las que tenemos en estudio, permitirán que Ciudad Real, vaya cambiando su fisonomía, poco a poco, pero de las inauguraciones de hoy, hemos querido hacer participes a todos los pueblos de la provincia, al dedicarles esta plaza, la que por su parte, puede considerarse la más monumental y como símbolo de una nueva era, que ya está alumbrando para Ciudad Real y su provincia.

Con esta plaza y sobre todo con esa monumental fuente, que dentro de unos momentos vamos a poner en marcha, queremos simbolizar los nuevos horizontes que se abren a nuestra provincia, poniendo en juego dos elementos: la energía eléctrica y el agua. La primera ya es una realidad que gracias a la política de nuestro Movimiento, está llegando a los rincones más apartados; pronto pondrá en marcha complejos industriales como el de Alcázar y Manzanares, moverá nuevas industrias en nuestra capital y muchos de nuestros pueblos. Del agua, cuyo suministro regular y suficiente empiezan a gozar nuestros convecinos, dejando atrás épocas de penuria y de angustia, pronto dispondrán de ella todos los pueblos, gracias al tesón de nuestro gobernador y a la puesta en marcha de un ambicioso plan, en el que la Diputación Provincial, hace una cuantiosa aportación.

Con la dedicatoria de esta plaza a la provincia no hacemos otra cosa que poner de manifiesto nuestra hermandad con todos los pueblos, haciendo votos, para que esta que el Caudillo en los últimos veinticinco años nos ha dado, se mantenga, siendo el celoso guardián para entre todos, continuar laborando por el engrandecimiento de la provincia, parte integrante de la gran España, que todos ensalzamos”.

Unos de los relieves de la fuente, el  alusivo al otoño con la vendimia: proceso inicial de la elaboración del vino, en el que se recoge la uva

Tras las palabras del Alcalde, este ofreció al Gobernador Civil el interruptor que iba a iluminar y hacer correr el agua en la fuente monumental y tras accionar el Gobernador el interruptor, la fuente se ilumino y comenzó a correr el agua, ante los aplausos de la gente allí congregada y la música de la Banda Municipal. La iluminación de la fuente corrió a cargo de la empresa “Vilumi”, que tenía su sede en la calle Lanza de nuestra ciudad.

Desde la inauguración de la fuente hasta nuestros días, esta sufrió una restauración que colocó los bordes de cobre en los remates de las bandejas que habían ido perdiendo las ranuras del borde, garantizando la caída del agua en líneas que van marcando el límite de cada una de las bandejas de la fuente en sus cuatro caras. También fueron retiradas las dos esculturas de las mujeres desnudas, ahora desaparecidas y que formaron parte en su día de esta fuente monumental.

Relieve alusivo al  verano con la siega: momento de recogida de los cereales

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