La
barriada de la Corredera empezó en los años 1929-1930 en los terrenos de las
Hermanitas, ya que estaba allí el asilo de las hermanitas de los Pobres (hoy
Colegio de los Marianistas). “Allá por el año 1933, por entonces era alcalde de
la ciudad don José Maestro, se hizo la desviación del ferrocarril Madrid-
Badajoz, por medio de una ancha curva que salía del paso a nivel de
Miguelturra, y moría enlazando con la general, por el surtidor de gasolina de
la Atalaya. Esta línea tenía un inconveniente muy grande, salía el tren de la
estación marcha atrás hasta el garitón del parque de Gasset, de la Cruz de los
Casados y entonces salía derecho a Madrid, la vuelta la hacía a la viceversa…”
Hace unas
semanas empecé un recorrido con diferentes reflexiones sobre la ciudad. Un
camino que comencé de la mano de Jacobs, una activista de lo urbano que luchó
por defender, desde planteamientos sencillos, pero próximos a la vida
cotidiana, la ciudad existente, evitando la presión especulativa y las grandes
transformaciones innecesarias promovidas por el capital. Y por ello, en este
breve recorrido realizado, hoy vuelvo a un barrio de Ciudad Real de la mano de
la crónica que un vecino hace del mismo. Ramón Coello Muñoz me hace llegar la
historia que ha escrito de la comunidad de Nuestra Señora de los Ángeles de
Ciudad Real, especialmente del barrio de la Corredera. Una visión que nos
acerca a la ciudad como realidad vivida por las personas que residen en ellas y
han sido actores de su desarrollo. Una historia cercana en el tiempo y en
lugares conocidos de la ciudad pero que nos ayuda a entender la ciudad que ha
surgido a lo largo del siglo XX.
Los
comienzos del barrio
“Esta comunidad
empezó allá por los años 1925-1926, que hicieron en ese momento en la vieja
carretera de Miguelturra (hoy paseo de Carlos Eraña), la panadería de Carmelo
Madrid, huerto del pescadero Polo, Casa de los Valencianos y Fábrica de la luz
(que pasó a ser almacén de abonos, hoy este desaparecido) y casa de los
Petróleos (que pasó a ser una chapistería y almacén de hierros cuyo propietario
era Sáenz del Rio y la casa de Vicente el Vaquero y Víctor). Más adelante, el
paso a nivel de la carretera de Miguelturra (línea Madrid-Badajoz), del cual,
en su momento, existía una de las guardabarreras que vigilaba, Luisa, la
hermana de Boni”.
La barriada de
la Corredera empezó en los años 1929-1930 en los terrenos de las Hermanitas, ya
que estaba allí el asilo de las hermanitas de los Pobres (hoy Colegio de los
Marianistas). “Allá por el año 1933, por entonces era alcalde de la ciudad don
José Maestro, se hizo la desviación del ferrocarril Madrid- Badajoz, por medio
de una ancha curva que salía del paso a nivel de Miguelturra, y moría enlazando
con la general, por el surtidor de gasolina de la Atalaya. Esta línea tenía un
inconveniente muy grande, salía el tren de la estación marcha atrás hasta el
garitón del parque de Gasset, de la Cruz de los Casados y entonces salía derecho
a Madrid, la vuelta la hacía a la viceversa…”.
La
barriada de la Corredera
“Volviendo a la
barriada de la Corredera, se empezó por lo que hoy es calle Extremadura, por
las casas 2.4.6.10 de Diego Molina, Florencio Molina, Dámaso Hervás y Antonio
Coello (la de mi padre) … A partir de aquí, allá por los años 1932-1934,
aumentó mucho la barriada, pues por allá entonces valían los solares a 1 peseta
el metro cuadrado, luego, cuando iban teniendo salida, se pusieron a 2 pesetas.
Se marcaron las calles de Andalucía como la calle Segunda, la Galicia como la
calle Tercera, la de Navarra siguiendo con el nombre de calle de Enmedio. Estas
calles seguían para arriba, conforme subían se acortaban, pues en semicírculo
arrancaba desde los Marianista el camino del Calvario que en media
circunferencia iba a morir al paso a nivel (hoy silos del grano)”. Pocos años
después los solares valían 5 pesetas el metro.
Entre 1945 y
1948 las calles de la barriada de la Corredera se llamaban calles A, B, C y D.
“Por las fechas anteriormente mencionadas, a la barriada de la Corredera se le
llamaba entonces el barrio churriego, pues casi todos los que vivíamos allí
éramos de Miguelturra; aquí no había agua y otros menesteres. Este líquido lo
traían las mujeres con cántaros a la cadera, de las fuentes que había en el
parque de Gasset, Puerta de Santa María y Puerta de Toledo”. La barriada
progresó en los años 1950-55 en que empezó la calle E (Aragón). En los años
57-58 la calle Castilla hasta 1963-64 en que se empezaron los bloques de san
Vicente de Paul- “Fue entonces cuando se unió toda la barriada en solicitud de
traer el agua, la cual nos fue concedida por el ayuntamiento, entonces el
alcalde en aquel momento era don Victorino Rodríguez Velasco. El enganche se
hizo en la puerta de Granada, que ya se había hecho el cambio de la fuente de
la plaza del Hospicio (hoy plaza de san Francisco) a la puerta de Granada. Se
trajo directa a las cuatro esquinas de las calles (hoy Navarra con Galicia)
donde se puso en el centro una fuente con cuatro grifos. Todo este gasto fue
realizado por todos los vecinos, el ayuntamiento sólo nos concedió el permiso.
Y a partir de entonces se llevó una general de tubería por cada calle, para
hacer acometidas por la casas conforme lo fuese permitiendo el bolsillo”.
La
capilla de la virgen de los Ángeles
“Entre los años
1970-1971 se trajo la santa Virgen de los Ángeles, la ermita de Nuestra Señora
era alguna casa que otra de los encargados que por entonces cuidaban de ella;
hasta que poco tiempo después la FEBA, hizo un nuevo trasformador y nos dejó el
viejo, el cual lo reformamos un poco y se hizo capilla. Las fiestas por
entonces eran muy pobres…En La Corredera toda esta comunidad de juventud que
congregábamos esta barriada (hoy barriada de Oriente) no éramos ni vecinos ni
amigos, éramos todos como hermanos… En las fechas de 1976, justo en el mes de
abril, se `puso la primera piedra de la parroquia. El arquitecto que proyectó
la iglesia fue Gerardo Barrios que falleció en accidente de tráfico antes de
ver finalizado el edificio. Las obras por “sobrar” mucho dinero duraron hasta
el mes de mayo del 78, en cuyo año se celebró la primera misa y fiesta de
Nuestra Señora de los Ángeles…”. En 1979 quedó constituida como parroquia
“haciéndose cargo de ella como párroco don Francisco Romero García, del cual
toda la comunidad parroquial está totalmente satisfecha. Cuando se puso la
primera piedra de la parroquia, y fue el alcalde don Francisco Bernalte
Bernardo, y durante toda la construcción el alcalde don José Ruiz Lorente se ocupó
de la misma, ya inaugurada como parroquia fue entonces el alcalde don Lorenzo
Selas Céspedes”.
Los barrios de autoconstrucción.
La historia de
nuestra ciudad se cuenta esencialmente desde las grandes promociones
inmobiliarias y los planes urbanísticos. Pero hay una parte importante de
espacios iniciados en la primera mitad del siglo XX con una propuesta atractiva
y sugerente, la de la autoconstrucción y desarrollo de los mismos propietarios
de sus viviendas. Al igual que en el barrio de la Corredera, en la barriada de
Larache surgen calles con parcelas que cada propietario construye (calles
Xauen, Ceuta, Melilla…) desde 1935, en el entorno de la Puerta de Santa María
en las calles con nombres de ríos (Becea, Jabalón, Azuer Bañuelos, Bullaque…,)
que se inician en 1930 o en la proximidad del actual recinto ferial en las
calles Atalaya, Piélago y Puente de Nolaya ya de los años cincuenta. La ciudad
construida por los vecinos, entendida como espacio de desarrollo de su
actividad laboral, como ámbito de relación comunitaria está presente en este
relato de un barrio de Ciudad Real como seguro lo está en la historia de muchas
de las zonas de nuestras ciudades.
Diego
Peris. “Lanza”, 2 de octubre de 2020