DE LA IGNORANCIA COFRADE DE ALGUNOS BLOGUEROS

Uno que ya esta vacunado contra ciertos personajillos que han pasado por nuestra Semana Santa y que no han hecho otra cosa que arruinar e hipotecar a las hermandades donde han estado, le produce sorpresa cuando ahora lo único que les queda para estar presente en nuestra celebración pasional es un blog y en este medio intentan sentar cátedra sobre ciertos aspectos de la misma.

Cuando leo ciertos comentarios en blog de eruditos cofrades en Internet, no salgo de mi asombro porque creía que tenían más formación cofrade, pero uno se da cuenta lo que siempre pensó, que son unos perfectos ignorantes y que saben muy poco sobre las hermandades y cofradías, su historia, su patrimonio y la simbología de sus enseres e insignias.

He podido leer hoy en un blog que dirige un defenestrado capataz, un interesante comentario bajo el titulo “Enseres de fiesta”. En esta reflexión este señor demuestra una vez más que la simbología de los enseres de las hermandades y cofradías no es lo suyo, aunque esta bien que intente confundir ya que siempre eso fue lo suyo.

Voy analizar su reflexión porque me parece que ya es hora de demostrar que sus escritos solo son fruto de su animadversión hacia ciertas personas y cofradías, pero que evidencian su incultura cofrade.

En la primera parte de ese escrito a este señor le parece bien la ofrenda de las Cofradías y Hermandades a nuestra Patrona la Virgen del Prado, pero con la sabiduría que le caracteriza advierte que “no pisemos el terreno del mal gusto y lo hortera”. Me estaba pareciendo interesante su reflexión y quería descubrir cuanto antes a lo que se estaba refiriendo cuando leo “Los enseres y atributos de las hermandades son para lo que están, para revestirlos de solemnidad y de ese algo especial que adquieren cuando acompañan a nuestros titulares, en cultos y procesiones, y como complemento barroco a nuestras túnicas nazarenas”. Y es hay cuando me di cuenta una vez más que este señor tiene un gran analfabetismo cofrade, porque deduzco que se refería a la presencia del estandarte corporativo o “Bacalao” en el cortejo de las hermandades.

Pero este señor debería saber que el Estandarte Corporativo es una de las insignias más importantes de todas cuanto poseen las Cofradías y Hermandades, son el símbolo de las mismas y son necesarias para los actos de las hermandades, y allá donde vaya la hermandad debe hacer acto de presencia. Es decir una hermandad o cofradía esta representada con toda su personalidad jurídica y canónica por el Estandarte Corporativo y este debe figurar siempre en lugar preferente en todos los actos en los qué ésta participe corporativamente.

Que yo sepa la Cofradía de la Flagelación, pionera en participar en la ofrenda a la Virgen del Prado, asistió el pasado 31 de julio corporativamente a la misma, por lo que sobra el justificar la presencia del Estandarte Corporativo, cosa que usted debería conocer. Aunque a lo mejor lo que desconoce es el significado de la palabra corporativa, por lo que creo que antes de hacer ciertos comentarios se debería documentar mejor para no hacer con los mismos el ridículo y le prometo promover un curso de formación sobre el lenguaje y la simbología cofrade con entrega de diplomas de asistencia, para que luego lo pueda publicar en su blog.

Sobre sus gustos personales nada de objetar, aunque a uno le choca que ahora alabe y busque la foto con personajes al igual que usted, que en otro tiempo para usted eran lo peor de nuestra Semana Santa. Pero la conversión nos llega a todos en algún momento de nuestra vida. Pero siento que no comparta la palabra “pionera”, porque cuando usted tenia responsabilidad en aquella Hermandad del Viernes Santo, intentaba por todos los medios imitar a la cofradía pionera de nuestra ciudad ¿recuerda?.

Ya lo decía Ramón y Cajal, “lo peor no es cometer un error, sino tratar de justificarlo, en vez de aprovecharlo como aviso providencial de nuestra ligereza o ignorancial. Y usted, perdone que le diga, una vez mas en su reflexión solo intenta obtener beneficio de la ignorancia de otras personas, ya que la ignorancia no es saber sino querer saber.